Los plenos de Vilanova se incendian a la mínima oportunidad, especialmente entre Gonzalo Durán, alcalde conservador, y el portavoz socialista, Javier Dios. La sesión de ayer no fue una excepción. Todo transcurría con normalidad hasta que en el punto de ruegos y preguntas, el socialista optó por leer un texto sobre el plan de ajuste al que está sometido el Concello. Durán le permitió leerlo, pero al finalizar le reprendió de manera airada por "haber incumplido la Ley, ya que este punto no es para leer textos o debatir, sino para hacer un ruego o una pregunta". Le advirtió que en la próxima ocasión "le llamaré al orden".

Las preguntas del grupo socialista solo encontraron respuestas parcas en palabras, lo que llevó a José Luis Tourís y a Ramón Trigo a "rogarle" al alcalde que "conteste a nuestras preguntas y que se nos trate con más respecto y sin humillaciones". La respuesta de Durán fue que "yo también estoy ofendido por una obra que está sin hacer", en alusión a la casa da cultura de O Esteiro. Javier Dios pidió que constase en acta que Durán "se niega a responder a nuestras preguntas".