La buena sintonía que existe entre Concello, Cofradía de A Illa y Consellería de Medio Ambiente para proteger el islote Areoso va a volver a demostrarse el próximo verano, cuando se van a aplicar una serie de medidas que pretenden evitar que la masificación de turistas acabe dañando, de manera irreversible, este entorno natural. Las tres entidades se reunirán en las próximas semanas, aunque están en contacto permanente por este tema, para analizar si es necesario aplicar medidas más importantes que las que se han instaurando en los últimos años.
Tras el paso del invierno, el islote sigue sufriendo importantes transformaciones y parece haber iniciado un camino irreversible que culminará con su fractura en dos zonas de tierra diferentes. Tanto Cofradía como Concello llevan años reclamando medidas de protección para evitar que los bancos marisqueros que rodean el islote y el hábitat del mismo acaben desapareciendo por la presión de los turistas. Entre las medidas adoptadas en los últimos años por la Consellería de Medio Ambiente destaca la limitación de los accesos con embarcaciones a motor, que no pueden adentrarse más allá de la zona de boyas para evitar que se dañe el marisco. También se ha acordonado una de las dunas para evitar que se pueda acabar degradando.
