Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

A Illa explorará nuevas vías para frenar la aplicación del POL en el municipio

El regidor, Carlos Iglesias, se reunió con los asesores jurídicos y consideran que la judicial está finalizada -El documento reduce a 32 las hectáreas urbanas en el Concello

Litoral de A Illa de Arousa. // Iñaki Abella

El cierre de la vía judicial obliga a A Illa a explorar otras vías para tratar de frenar la implantación del Plan de Ordenación do Litoral en el municipio. El regidor isleño, Carlos Iglesias, se reunió ayer con los asesores jurídicos municipales para comenzar a analizar esas nuevas vías tras el varapalo que ha supuesto para los intereses de la localidad la decisión del Tribunal Supremo de rechazar el recurso contra el documento.

"Todavía tenemos que perfilarlas, pero creemos que aún existen posibilidades que debemos estudiar y analizar para ver si es factible ponerlas en marcha", explicaba ayer el regidor tras la reunión con sus asesores. No en vano, pese a la decisión judicial, el Concello está dispuesto a mantener esta batalla si encuentra el más mínimo resquicio para hacerlo ya que el Plan de Ordenación do Litoral supone un duro golpe al crecimiento urbanístico, en especial a los espacios catalogados como urbanizables, es decir, aquellos que están incluidos dentro de las áreas de reparto.

El POL no deja precisamente en una buena situación al municipio. El documento es mucho más restrictivo que el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) aprobado en 2002, documento éste que ya tiene algún grado de protección sobre el 70% de la superficie de A Illa.

El Plan de Ordenación do Litoral divide en cuatro zonas de protección el municipio. La primera de ellas se ajusta como un guante al Plan Xeral, mientras que en la segunda, el POL es prácticamente compatible con el ordenamiento urbanístico de A Illa, pero marca una serie de requisitos para poder desarrollar las áreas de reparto, es decir, las zonas de suelo urbano no consolidado.

El problema se haya en el tercer grado de protección, donde la normativa impulsada desde la Xunta incluye a 28 áreas de reparto, convirtiendo su catalogación en el PXOM en incompatible con el POL. Desarrollar una de esas áreas de reparto puede convertirse en un imposible, al obligar este nivel de protección a realizar los ajustes que establezca la Consellería, impidiendo que se construya como marca el PXOM. Entre estas áreas de reparto se encuentran las ubicadas en Abilleira, As Aceñas o Con do Sol.

Otra de las discrepancias que localizaron los servicios técnicos de A Illa en su momento es que la zona norte, desde O Campo hasta el Con de Tres Pés ha sido catalogada como entorno de interés paisajístico, cuando la mayor parte de este territorio es una zona urbana consolidada. Los cálculos realizados en su momento es que de las 108 hectáreas de suelo urbano no consolidado que figuran en el PXOM, tan solo podrían desarrollarse unas 32 aproximadamente.

Compartir el artículo

stats