Es cierto que las intensas precipitaciones obligaron a posponer hasta este fin de semana buena parte de las actividades de carnaval en los municipios de O Salnés y el Ullán. También en Valga, donde hoy se celebra el concurso de disfraces, y en O Grove, aunque en realidad en esta última localidad los trastornos no fueron tantos, pues ya tenía previsto decir adiós al Entroido este mismo fin de semana, pues estaba convocado para ayer por la noche el tradicional "Sábado de Xareo" de la isla de A Toxa.

Alrededor de doscientas personas acudieron a la cita, en la que se anunciaba un suculento menú y animación a cargo del artista local Javi Solla, todo ello en el hotel balneario Eurostars Isla de La Toja, de cuatro estrellas.

Así pues, como se dijo desde un principio, la villa meca estrenó el Entroido 2016 con el "Xoves de Comadres e Compadres", que tuvo lugar el día 4, y lo despidió anoche con el "Sábado de Xareo", casi tres semanas después.

En cuanto a las actividades aplazadas, que a la postre sirvieron de aperitivo al "Sábado de Xareo", puede decirse que ayer por la tarde, con un sol radiante que nada tenía que ver con las condiciones meteorológicas de las últimas semanas, se celebraba la "Gran Marcha do Entroido" por el "Sambódromo Meco". Este desfile de disfraces grovense volvió a caracterizarse por la cantidad y espectacularidad de los grupos -dos docenas- y parejas presentados, algunos de indudable vistosidad y casi todos derrochando imaginación.

Buena parte del éxito de esta convocatoria se debe a la cuantía de los premios establecidos por el Concello, ya que los adultos -a partir de 14 años- se reparten en el desfile meco casi 2.000 euros, en las categorías de grupos, parejas e individuales. A su vez, para los niños de menos de 14 años se establecen premios por valor de más de 700 euros, a lo que se suman 120 euros más para los tres mejores choqueiros.

A lo largo del "Sambódromo" pudieron verse "fantasías" como las que lucen cada año en los carnavales de Tenerife -o al menos eran algo parecidas-, como también equipos de competición en el mundo del motor, grandes carrozas repletas de brujas y un largo etcétera de disfraces.

Con motivo de esta actividad cales como Castelao, la popular "catorse", se convirtieron en una gran discoteca en la que todos cantaban y bailaban, tanto los participantes en el concurso como los ciudadanos que abarrotaban las aceras para presenciar el espectáculo.

Tras el desfile, y cuando ya había caído la noche y muchos se disponían a dirigirse al "Sábado de Xareo" de A Toxa, se desarrolló el significativo acto del "Enterro da Sardiña", en el que se despedía también a las "xoubiñas" confeccionadas para homenajear a los niños. Este año la cita, en la que se premiaba a las mejores "plañideras", estuvo claramente marcada por la polémica generada a causa del rechazo del sector del mar a la Lei de Acuicultura de Galicia.

Finalmente se organizó una fiesta de entrega de premios en la "Carpa do Entroido", específicamente habilitada para esta fiesta a manos del Concello.