Cuando de carnaval se habla, en A Illa existen dos fechas marcadas en el calendario: el Lunes de Entroido y el Sábado de Carrozas. Esta última jornada no pudo celebrarse por causa de la lluvia, siendo aplazado para la jornada de ayer, en la que el colorido de los trajes y la fiesta de las comparsas y carrozas volvió a colapsar el casco urbano.
En el desfile se pudieron ver disfraces de todo tipo, la mayor parte elaborados por ellos mismos, una de las tradiciones que todavía se mantiene en A Illa, que puede presumir de contar con el Entroido más anárquico y espontáneo de toda la comarca de O Salnés, ya que la administración local tan solo colabora con material para la elaboración de carrozas y poco más. Vikingos, soldaditos de plomo, egipcios, militares, trogloditas y hasta unos Eduardo Manos Tijeras fueron solo algunos de los disfraces que se pudieron ver en el desfile.
La marcha comenzó en las inmediaciones de la Casa do Mar, donde se fueron congregando las diferentes carrozas, varias de ellas foráneas, para recorrer toda la avenida da Ponte, Castelao, O Campo, Regueiro y Congostra do Rico, antes de regresar a la plaza de O Campo, donde continuó la fiesta hasta altas horas de la noche como despedida a un Carnaval que ha sido, cuanto menos, atípico en A Illa debido a las malas condiciones meteorológicas.
Al otro lado del puente, en Vilanova de Arousa, el carnaval también es uno de los eventos más importantes que se celebran en el municipio gracias al Momo. La identidad del personaje es uno de los secretos mejor guardados de los vilanoveses, y no se conocerá hasta hoy a las 17 horas, cuando comience el desfile.
Pero desde hace años, Vilanova rinde un particular recuerdo al Momo, con un particular velatorio lleno de viudas, curas y brujas que no paran de escenificar su pena por la "morte do Anxelo". Ayer no fue una excepción.
Desde las 20 horas se desarrolló un velatorio en el que lo tétrico y el humor son dos de los ingredientes principales que sorprenden a todos los que se acercan.
Entre las novedades incluidas este año estuvo el hecho de que solo aquellas personas que acudiesen disfrazadas al evento pudiesen degustar los postres tradicionales del carnaval y una queimada suculenta.
Hoy está previsto que se acerquen un considerable número de carrozas y comparsas de varios puntos de Galicia para desfilar en el que ya se conoce como del "momódromo". Serán aproximadamente 2.000 las personas que desfilen, pero como espectadores se esperan unas 20.000 personas, por lo que se han habilitado una serie de estacionamientos en las zonas de O Terrón y el puerto deportivo.
