Ricardo Herbón, presidente de la Organización de Productores de Mejillón de Galicia (Opmega), que con 750 bateas es una de las referencias tanto en el panorama acuícola como en la Mesa do Mexillón, cree que la decisión de Feijóo ha sido "una respuesta adecuada a nuestras demandas; el sector planificó bien su postura frente a esta ley que genera inseguridad, que es lo que nos preocupa de verdad, y parar el trámite es lo que necesitábamos y queríamos". Preguntado sobre las intenciones de la Xunta, en el sentido de fomentar el diálogo y buscar consenso, responde que "hay que agotar siempre las vías de negociación, sobre todo tratando de mejorar el rendimiento y eficacia de nuestras rías". Herbón está convencido de que ese es el rumbo a seguir "porque la gente del mar puede aportar muchas cosas; podemos participar y ayudar a hacer una ley realmente importante en base a nuestra experiencia". Incluso cree que "no hay que tirar nada por la borda", ni siquiera el anteproyecto ya elaborado, pues es posible desarrollarlo aprovechando las cosas buenas que también encierra. "Lo que hay que hacer es mejorarlo mediante un trabajo en conjunto, para dar a la gente del mar lo que pide y acabar con la incertidumbre; pero no debemos tener un reglamento a expensas del gobierno de turno, sino que necesitamos una legislación consensuada pensada por y para el sector", concluye el líder de Opmega.
