El llamamiento del Ayuntamiento de Vilagarcía a los vecinos de Celso Emilio Ferreiro para explicarles el sistema de compostaje comunitario que el gobierno socialista quiere estrenar en este humilde barrio despertó escaso interés entre los residentes de la zona. Y es que a la charla matinal acudieron a cuentagotas una docena de personas, y a la vespertina (a las cinco de la tarde), unas diez. Así lo cifra el propio concejal de Medio Ambiente, Lino Mouriño. "Sabemos que nos va a costar, pero vamos a insistir y a apostar por este barrio que estaba olvidado. ¿Por qué no va a poder ser pionero?", reivindica el edil.

El responsable municipal tiene "más esperanzas" depositadas en O Piñeiriño, donde hoy se celebran las sesiones informativas en igual horario: a las 11 y 17 horas en el parque del barrio. "En el colegio los alumnos trabajan el reciclaje" -dice Mouriño-, por lo que están más familiarizados con este asunto. No obstante, advierte de que no tirará la toalla con Celso Emilio Ferreiro, donde luchará para poder implantar un sistema de depósito y tratamiento de residuos orgánicos respetuoso con el medio ambiente.

Los vecinos que respondieron a la convocatoria recibieron de la mano de los técnicos municipales un folleto informativo sobre el compostaje, así como la aclaración a las dudas planteadas. La reunión de la mañana estuvo presidida por la concejala de Urbanismo, Paola María, porque el edil de Medio Ambiente, Lino Mouriño, no podía asistir por problemas de agenda. Sí acudió a la charla de la tarde. "La mayoría de la gente que se interesó en el compostaje eran mayores que ya estaban acostumbrados a hacer abono natural para los animales antaño. Además, vino el presidente de una comunidad de vecinos y la vicepresidenta de otra; ambos iban a informar de la elaboración de compost en sus respectivos edificios", comenta Lino Mouriño.

Los vecinos de Celso Emilio Ferreiro y de O Piñeiriño disponen de un plazo de una semana para inscribirse en el sistema de compostaje. El Concello prevé colgar hoy en su página web el formulario. Una vez que expire ese período, se pondrá en contacto con la Diputación para comunicarle la estimación de los vecinos interesados en reciclar sus residuos orgánicos en las inmediaciones de sus casas de un modo que ayude a reducir la contaminación.

Aparte de las ventajas medioambientales, el Ayuntamiento defiende también otras de carácter social (contacto de las personas con la naturaleza, recuperación de los trabajos comunitarios en aras de lograr una cohesión social y creación de una herramienta de educación ambiental y participación ciudadana) y económica (ahorro en fertilizantes y en la recogida de basura).

El compostaje es un proceso de transformación de residuos orgánicos para obtener compost, un fertilizante natural. Esa transformación se realiza en un compostero sin ningún tipo de mecanismo, motor ni gasto de mantenimiento. Lo único que se exige es la inversión de diez minutos de tiempo a la semana. "La basura diaria que se genera en los hogares contiene un 40-50% de materia orgánica, que puede ser reciclada y devuelta a la tierra en forma de humus para las plantas y cultivos. De cada 100 kilos de residuos orgánicos se obtienen entre 10 y 25 kilos de compost", dice Ravella.