Tras la apertura de la senda peatonal que une el entorno de la casa da cultura de O Esteiro con los molinos de Currás, el Concello de Vilanova de Arousa ha comenzado a trabajar en diferentes fórmulas que permitan llevar a cabo la rehabilitación de este entorno etnográfico. La senda, construida por Costas del Estado, ha servido para recuperar un antiguo camino que unía el entorno de A Pantrigueira y Currás con Vilanova, bordeando la ensenada de O Esteiro. Aunque, por aquel entonces, era un simple sendero utilizado por los vecinos, en el proyecto desarrollado ahora tiene como objetivo convertirse en un espacio de ocio y en un importante atractivo turístico, ya que la ensenada es uno de los espacios naturales más importantes de Vilanova.
La senda cuenta con poco más de un kilómetro y desemboca justo en el lugar donde se encuentran los molinos, de ahí que el Concello vea con buenos ojos recuperar alguno de los proyectos que se barajó en su momento para recuperar ese conjunto de tres edificaciones, las cuales se encuentran muy degradadas y en ruinas.
La principal opción es recurrir a un Obradoiro de Emprego que trabaje en la puesta en valor de las tres edificaciones y se centre en llevar a cabo esta segunda fase de la recuperación de la fachada marítima en O Esteiro y de la desembocadura del pequeño río Currás. Hace unos meses, el Concello volvió a contactar con los propietarios de los molinos, comenzando unas negociaciones que se encuentran muy avanzadas y que se espera que lleguen a buen puerto en un breve espacio de tiempo.
El proyecto no solo se limitaría a los tres inmuebles, sino que sería mucho más amplio. No en vano, en las inmediaciones de los molinos, el Concello posee más de 1.000 metros cuadrados de terreno en los que se podría acometer algún tipo de actuación, además de mejorar el actual mirador, que está muy degradado.
La rehabilitación de los molinos de Currás es una vieja aspiración de la que se lleva hablando más de una década, pero que, por muchos motivos, nunca se ha concretado, algo que ha agravado el estado en que se encuentran los ruinosos edificios.
