La playa de O Preguntoiro ha sufrido un importante lavado de cara. Primero fue la renovación de toda la balaustrada de la fachada marítima. La antigua barandilla incumplía la normativa de seguridad y se encontraba en un estado deficiente, por lo que Portos de Galicia colocó medio kilómetro de una nueva, similar a la del paseo de Carril. En algunos espacios se colocaron bancadas para que los ciudadanos pudiesen sentarse allí a contemplar el mar. Más recientemente esta actuación se completó con la regeneración de la playa con un importante aporte de arena y con la canalización de la recogida de aguas pluviales que hasta ese momento se vertían al arenal. Ahora el gobierno de Vilagarcía pretende continuar mejorando el entorno de este espacio con bandera azul con la dotación de zonas verdes en la explanada de aparcamiento y la construcción de aseos públicos.