Las actividades del sindicato San Martín de Padrenda se mantuvieron durante los años 1920-22 en los que la compra de maíz, azufre y abonos minerales eran las principales operaciones mercantiles ligadas a la actividad agroganadera del momento.
Pero poco a poco éstas se fueron diversificando y así se constata en 1920 la llegada de harina canadiense, en cuya compra se invirtieron 2.930 pesetas "incluyendo los arrastres", la cual el sindicato vendió en sacas de 63,5 kilogramos. al precio de 46,60 pesetas la saca (esto es, 73 céntimos de peseta el kilo de harina).
Y con fecha 27 de marzo de 1922 se adquirió incluso una caja de "jabón sevillano" que contenía 36 barras vendiéndose la barra "al precio de siete reales y quince céntimos" (3,65 pesetas), las cuales fueron adquiridas por un total de 14 socios, según se expresa en las actas que acaban de ver la luz.
Pero sin duda lo más destacable de esos años fue la inmersión del sindicato en la actividad ganadera, centrada sobre todo en la ganadería bovina.
La entidad adquiría novillos que luego cedía a caseros para su crianza en régimen de aparcería por el cual, al cabo de los meses, en la operación de venta posterior sindicato y casero se repartían ganancias.
Así el 17 de agosto de 1920 se constata que se vendieron dos novillos propiedad de la entidad por 750 pesetas, operación en la que se ganaron "diez pesetas y ochenta céntimos para dicha sociedad", y que en 1922 se invirtieron otras 500 pesetas en "dos novillos que están en aparcería en casa de Balbina Chaián", además de un caballo en casa de Vicente Pérez comprado en "ciento cincuenta pesetas".
Incluso se acredita que el 18 de abril de 1921 se pagaron a Dolores Castro 35 pesetas "por el aborto de una vaca".
El sindicato saldó con balance positivo sus primeros años de actividad. Así el 1921 se cerró con un balance de 4.189 pesetas, si bien "cubiertas todas las atenciones del cargo y dotaciones del sindicato" resultaron a favor del mismo la cantidad definitiva de 762.
La entidad languideció en los años 1923-24 en los que solo se constatan pagos de deuda que revelan que la organización había entrado en una vía muerta de la cual ya no saldría, si bien no se especifican las causas.
