La oposición ha demandado en reiteradas ocasiones del gobierno local medidas para retirar estos peligrosos obstáculos situados en medio de las carreteras de la localidad.

La socialista Icía García apela a la negociación: "Pienso -asegura- que el concello no debe acceder a pagar las cantidades que pide Fenosa, que entiendo exageradas, pero el gobierno local sí debe hacer un trabajo continuo de persuasión para conseguir, si no que los retiren por su cuenta, por lo menos negociar un precio razonable". "Lo que no entiendo -continúa- es como se acomete el ensanche de un vial sin tener cerrado el retranqueo de los postes, igual que se tiene cerrado antes con los propietarios la cesión de los terrenos, es un todo".

Por su parte el edil de Meaño Independente (MI) José Manuel Aspérez entiende que el gobierno local debe jugar sus bazas a la hora de negociar: "El concello de Meaño no es un cliente cualquiera para Fenosa -afirma-, es un cliente que paga al año 165.000 euros en su factura eléctrica".

Por tanto, a su juicio,"si Fenosa no se aviene a retirar esos postes o a negociar un precio razonable el concello debe mover ficha y barajar el cambio a otra comercializadora: veremos entonces si Fenosa se queda de brazos cruzados y pierde un cliente que le aporta 165.000 al año".

Por su profesión Aspérez Montes es conocedor del aspecto legal que envuelve la situación. "No existe un proceder estándard en caso de accidentes contra estos postes, depende mucho de los daños habidos o los heridos". "Tenemos un caso -continúa- de un concello donde la compañía de seguros ha dirigido su reclamación contra la empresa, pero ésta trata de inhibirse y culpa al concello por haber permitido la circulación en un vial que no estaba apto para ello". "El gran problema -advierte Aspérez- va a surgir cuando haya un accidente con víctimas, entonces lo lamentaremos todos".