El grovense Javier Olleros, una de las dos estrellas Michelín que hay en la comarca de O Salnés, ofrece una serie de sugerencias para elaborar un menú para una noche tan mágica como la del día 24.

Antes de entrar en materia, el chef grovense del Culler de Pau recomienda no volverse loco a la hora de adquirir muchos productos, especialmente aquellos que disparan su precio por estas fechas, y echar un ingrediente básico que debe existir en todas las comidas, "mucho cariño, que es como se deben elaborar siempre estos platos, y más en un día tan especial como este, en el que se reúne a toda la familia alrededor de la mesa".

Olleros recomienda elaborar como entremeses "unas croquetas de la comida del día anterior para picar". Su primer plato serían unos erizos con mayonesa cítrica y yogurt, espolvoreada con polvo de limón.

A continuación, la propuesta sería una crema fina y delicada de grelos y espinacas rematada con picatostes de pan y unas gotas de aceite.

Para el segundo plato recomienda dos opciones. La primera de ellas sería un clásico bacalao acompañado de champiñones salteados y cuscús de coliflor, mientras que la otra sería una pularda de Mos macerada en salmuera (al 15%) durante seis horas para asarla después en el horno, primero a 200 grados y después a 160.

A medida que se vaya haciendo en el horno, pintarla con su jugo y aceite y saltearla con dos cabezas de ajo así como tomillo u orégano.

La pularda debería tener guarnición con puré de castaña, unas zanahorias y patatas guisadas. Para acompañarla, una copa de cóctel de manzana y apio licuados, bien frío.

Llegados al momento del postre, Olleros propone una torrada con helado de leche gallega al que se le debe añadir un poco de piel de limón rayada.