El colegio de Pontecesures acoge esta tarde, a las 20 horas, una charla sobre ciberacoso y ciberdependencia. Se trata de una actividad organizada por el Servicio de Prevención de Drogodependencias (SPAD) de Catoira, y su objetivo es concienciar a los niños y sus padres de los riesgos que puede entrañar la navegación por internet o el uso inadecuado de las redes sociales o las aplicaciones de mensajería instantánea. Esta misma charla se celebró ayer en Catoira, y la impartieron el técnico del SPAD Manuel Isorna y el responsable del equipo de Investigación Tecnológica de la Guardia Civil de Pontevedra, José Torres.
-Las autoridades alertan desde hace años de los riesgos que entraña internet para los niños y adolescentes. ¿Han aumentado ahora que se ha popularizado la navegación a través de los teléfonos móviles o las "tabletas"?
-Sin duda. Estamos hablando de dispositivos con mucha potencia, con tarifas de datos de hasta cuatro gigas, y que el niño puede utilizar en cualquier lugar, no como ocurría con el ordenador de sobremesa, que solo podía utilizar en casa. Hay que pensar que en estos momentos hay en España unos 52 millones de líneas activas, y somos unos 47 millones de habitantes.
-Antes recomendaba a los padres acompañar a los niños durante la navegación. Pero ahora es más complicado con la aparición de los móviles. ¿Lo sigue aconsejando?
-Sí, es algo que siempre aconsejo. Cuando los niños empiezan a mostrar curiosidad por internet es cuando los padres tienen que sentarse con ellos y empezar haciendo una navegación conjunta, explicándoles en qué páginas pueden entrar y en cuáles no, que hay contenidos que no son apropiados... Los padres tienen que hablar con los hijos y explicarles que internet es una herramienta maravillosa, pero que también tiene riesgos.
-¿Antes de que edad no se debería comprar un teléfono móvil con internet a un niño?
-Esa es la gran pregunta... Está claro que hoy en día el regalo estrella en las Primeras Comuniones es el teléfono móvil, pero creo que a esa edad es demasiado prematuro. Con un teléfono que solo permitiese llamar y mandar mensajes de texto no pasaría nada, pero para creo que con un teléfono con tarifa de datos le estamos dando a un niño de ocho o nueve años las llaves que le abrirán un mundo para el que no están preparados.
-¿Han aumentado los casos de ciberacoso a niños y adolescentes?
-Sí, hay un aumento considerable de denuncias, y eso a pesar de que en muchos casos la víctima rehusa denunciar o contarle a los padres lo que le está pasando por miedo a que le quiten el teléfono o le prohiban navegar por internet. Lo que yo les diría a los padres es que cuando tengan conocimiento o sospechen que su hijo está sufriendo ciberacoso que lo denuncien, pero también que se pongan del lado de la víctima, que es su hijo, y que no le prohiban acceder a internet o utilizar el móvil.
-¿Están los profesores preparados para esta realidad relativamente reciente?
-Los profesores están muy concienciados, y de hecho son a menudo los primeros en detectar el problema. Puesto que pasan muchas horas con los niños, a veces son los primeros en notarlo nervioso, disgustado o que tiene un bajón en su rendimiento escolar. Asimismo, actúan muchas veces como mediadores para resolver los conflictos. Los profesores están haciendo un gran papel.
