- ¿Siente miedo ante la situación que se vive ahí? ¿Ha llegado a cambiar sus hábitos?

- Miedo no. ¡Hombre! Sí vas con algo más de atención, limitas un tanto las salidas? Pero no puedes ir por la calle mirando con recelo a toda la gente con la que te cruzas, máxime en Bruselas porque aquí todo son congoleños, magrebíes, turcos, italianos, portugueses, españoles? Incluso en los cuerpos de seguridad hay magrebíes. Cuando te metes en el metro o en una calle comercial, al poco escuchas hablar en seis o siete idiomas, Bruselas es una ciudad así de ecléctica y cosmopolita.

- ¿Había previsto acudir a presenciar el partido España-Bélgica?

- No, ese día iba a estar en casa de unos amigos. Lo de suspenderlo sorprendió a muchos. Aquí se dijo que no había suficiente policía o fuerza militar para focalizarla en un evento deportivo como ese, que era además de carácter amistoso, dejando desprotegidos otros lugares u otros operativos. Creo que se le dio mucho bombo a todo esto, aquí no se habló tanto del asunto.

- ¿No está preocupada su familia den Meaño estos días?

- Lógicamente, sí lo están un poco pero les digo en broma "vosotros tranquilos que ya tiemblo yo", pero no sé si eso los tranquiliza.

- ¿Nota que se alza estos días en el plano político alguna voz contra musulmanes y magrebíes?

- No, Bruselas es una ciudad muy pactista en lo político, hay mucha pluralidad y es difícil que se den mayorías absolutas. No se oyen voces de extrema derecha, puede que en otras zonas de Bélgica sí, pero en Bruselas no, ésta es la ciudad de la unión, pero también de la diversidad. creo que los musulmanes, también son víctimas de todo lo que está sucediendo.