Las primeras partidas de vieira gallega llegan hoy a los mercados, después de que una treintena de operarias procediesen ayer a limpiar, eviscerar, envasar al vacío y etiquetar los 3.500 kilos que la flota pescó el lunes, y que permanecieron prácticamente 24 horas en los tanques de depuración de Mariscos Veiro, que es la planta donde se manipula este preciado marisco.

El trabajo lo realizan unas 30 mujeres, dos tercios de las cuales ya tienen experiencia en otras campañas de la vieira. Aún así, el hecho de que la extracción se iniciase este otoño unas semanas antes de lo habitual hizo que algunas operarias estén en otros trabajos, de ahí que se hayan incorporado media docena de personas nuevas.

El grueso de la labor se realiza en cadena, y culmina con una nueva analítica que se realiza sobre cada partida, para garantizar la calidad del producto. Esas analíticas motivan que el producto tarde algo menos de 48 horas en llegar al consumidor final (el almacén de una empresa de alimentación o la despensa de una cocina) desde el momento de su extracción.

Buena parte del marisco se sirve fresco, aunque también se congela una parte para ir sirviendo a los clientes a lo largo del año.

En torno a la mitad de la producción se queda en Galicia, y los consumidores podrán encontrarla en restaurantes, tiendas de alimentación y algunos supermercados, y la otra mitad se vende en el resto de España, principalmente en Madrid y Barcelona, según explica Mar Ambroa, que es la gerente de Porto de Cambados, empresa que comercializa la vieira arousana y cuyo socio mayoritario es la cofradía de pescadores.

Se cogen los cupos

La flota salió a pescar ayer en lo que fue el segundo día de la campaña, y la tónica fue similar a la del lunes. En esta segunda jornada faenaron siete embarcaciones más (un total de 25), y entre ellas había cuatro del puerto de Rianxo, después de que el lunes no acudiese nadie desde ese puerto. A primera hora de la mañana se estableció un tope de capturas de 40 kilos por tripulante (frente a los 70 del lunes), habida cuenta de que el cupo disminuye cuantos más barcos salgan a faenar. Además, la previsión de Porto de Cambados es eviscerar 15.000 kilos a la semana, y en la jornada de arranque se obtuvieron 3.500 kilos, de ahí que ayer se optase por extraer solo 2.800.

Una vez más algunos barcos consiguieron hacer los topes de capturas con relativa facilidad, hasta el extremo de que estaban de vuelta en el muelle de Tragove poco después de las 10 de la mañana, apenas un par de horas después de iniciar la extracción.

La situación fue similar el lunes, aunque la flota piensa que el recurso comenzará a escasear pronto. El patrón mayor, Ruperto Costa ya dijo que la previsión es que la escasez de vieira empezará a notarse en cuanto se trabaje unos días más en la misma zona IV.