Los vecinos de las comarcas de O Salnés y Caldas soportaron peor la crisis que los demás ciudadanos de la provincia de Pontevedra y que la media gallega. Y es que fueron los que sufrieron una mayor pérdida de poder adquisitivo desde el inicio de la crisis, según los últimos datos publicados por el Instituto Galego de Estadística (IGE). Así, en un periodo de seis años, los hogares salinienses y caldenses vieron reducidos sus ingresos mensuales en 224 euros, al pasar de una media de 2.065 euros a 1.841, mientras que los descensos en las otras comarcas de Pontevedra oscilan entre los 80 euros de Pontevedra nororiental (Deza, Tabeirós, ...) y los 204 euros del área de Vigo. En el conjunto de Galicia la renta familiar cayó 116 euros: de 2.026 a 1.910 euros.
Pese a que Caldas-O Salnés es la zona de la provincia cuyas economías domésticas experimentaron un mayor recorte durante la época de vacas flacas, no son las más bajas. La zona que el IGE denomina como Pontevedra sur es la de menor poder adquisitivo de la provincia, con unos ingresos mensuales por unidad familiar de 1.693 euros.
En el lado opuesto se encuentra el área de Pontevedra capital, la única que sigue superando los 2.000 euros de ingresos mensuales por hogar. Evidentemente se trata de una media (concretamente de 2.033 euros), por lo que unos ciudadanos pueden cobrar más y otros menos. Los vecinos de la ciudad del Lérez y su zona de influencia perciben 176 euros menos por hogar que en 2007.
Desglosando los datos por miembros del núcleo familiar, solo Pontevedra sur, con 628 euros, y O Morrazo, con 640, tienen rentas per cápita por debajo de la de O Salnés, que se sitúa en 650 euros, 30 menos que antes de la crisis. Pontevedra ciudad lidera los ingresos medios mensuales por persona, con 759 euros. Le sigue Vigo, con 735.
En relación al número de personas que cuentan con una remuneración, la media es de 1,84 en Galicia y 1,83 en la provincia de Pontevedra. En O Salnés es de 2. No obstante, en todas las comarcas estas cifras han caído debido al aumento del paro desde el periodo anterior a la crisis.
Es difícil llegar a fin de mes
Otro de los parámetros de los que informa el Instituto Galego de Estadística es la dificultad o facilidad de las familias de llegar a fin de mes con sus ingresos. En los municipios salinienses y caldenses, casi un 68% de los hogares, o lo que es lo mismo, casi 35.000, tienen "dificultad" o "mucha dificultad" para que la cuenta bancaria no esté en números rojos antes de que acabe el mes. Es de las cifras más elevadas de la provincia, con la salvedad de Pontevedra sur, donde a un 69% de sus economías domésticas (solo un punto más que las de O Salnés) les cuesta llegar a fin de mes.
Donde más facilidades se registran son en Pontevedra Nororiental (Deza, etc.) y O Morrazo, siempre según los datos de la Enquisa Estrutural de Fogares del IGE. En los municipios de Deza y A Estrada, la mitad de las familias sondeadas admitieron llegar con "facilidad o mucha facilidad" a final de mes. Le siguen los municipios morracenses, con un 45,35%. En los arousanos, solo el 32% de los núcleos familiares carecen de problemas para terminar el mes.
Llama la atención que mientras que los vecinos de O Salnés son los que han sufrido un mayor descenso de sus ingresos desde el inicio de la crisis y unos de los que mayores dificultades tienen para llegar a fin de mes, la tasa de riesgo de pobreza es más baja que la media gallega (16,57) y que la provincial (18,45) con un 16,27%, apenas un punto más que en 2007. Los peores datos se registran en Pontevedra sur, con un 22,12%.
