El Concello de Vilanova y Cáritas Interparroquial Arousa han estrechado sus lazos de colaboración. Las dos entidades firmaron ayer un convenio que va a permitir al Concello tener un destino para los cultivos que se realizan en el pazo de Vista Real, mientras que la entidad social tendrá a su disposición productos frescos de la huerta para ofrecer en su comedor. Gonzalo Durán y Francisco Fernández firmaron ayer el convenio en representación de las dos instituciones y fueron los artífices del primer intercambio que genera, la entrega de varios centenares de kilogramos de kiwis cultivados en los terrenos del pazo de Vista Real.

Durán apuntaba ayer que este convenio "supone que toda la producción que se genere en Vista Real irá a parar a Cáritas, para que tenga un uso social, ya que el objetivo no es su comercialización". Insiste el regidor vilanovés en que "sería un pecado tirar estos productos, por eso valoramos que la mejor opción era recurrir a Cáritas, que realiza una importante labor entre los más necesitados de forma totalmente desinteresada".

Por su parte, Francisco Fernández, agradeció al Concello su generosidad y destacó que la institución "está carente de alimentación en fresco, lo que ha llevado a detectar entre muchos de los usuarios la presencia de colesterol y glucosa en niveles muy altos". Fernández reconoce que en los últimos meses se ha detectado "un pequeño descenso en los niveles de pobreza que había en la comarca, ya que hay gente que ha conseguido empleo, algunos de ellos, a través de nuestros programas, como ha sido el proceso de reinserción de personas alejadas en San Cibrán, donde se ha conseguido reinsertar en el mercado laboral a seis personas". Sin embargo, reconoce que queda todavía mucho por hacer para acabar con la situación en la que se encuentran muchas familias de la comarca de O Salnés.

El convenio es un paso más en el proyecto que se ha diseñado para Vista Real. No en vano, explicaba ayer el edil de Industria, Javier Tourís, el pazo se está convirtiendo en "un centro experimental para buscar cultivos alternativos en la agricultura de la comarca de O Salnés". No en vano, en el invernadero que existe en el pazo y en los terrenos que está utilizando el Obradoiro de Emprego se ha comenzado a experimentar con productos como la quinea, el aguacate, la zanahoria morada o una variedad especial de trigo. "El objetivo es comprobar cómo se adaptan a la tierra y a la climatología local, permitiendo así comprobar si es factible su cultivo", explica. Insiste en que el proyecto "no ha nacido de la nada, sino que llevamos trabajando mucho tiempo, con escasa inversión, en su impulso".