Las clases de biología y ámbito científico que imparte el profesor Camilo Ojea en el Centro Público Integrado de Mosteiro, en Meis, también tiene una faceta práctica en los alrededores del colegio. Los alumnos de ESO, en colaboración con funcionarios de la Xunta de Galicia, pudieron poner en práctica el control medioambiental sobre el Rego de San Tomé, afluente del río Umia y verificar la salud de los peces mediante la pesca eléctrica.
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El veranillo de San Martiño ha permitido el desarrollo de una clase práctica fuera de las instalaciones del colegio de Mosteiro para estudiar el estado de uno de los afluentes del río Umia, conocido como Rego de San Tomé, que pasa por el centro de la localidad meisina. En esta práctica, alumnos y profesores contaron con la colaboración especial de personal de la Consellería de Medio Rural de la Xunta de Galicia, que aportaron los equipos de pesca eléctrica para que pudieran hacer el control y clasificación de los peces que habitan este cristalino regato.
La comitiva estudiantil de enseñanza secundaria obligatoria, encabezada por el profesor de biología y ámbito científico Camilo Ojea, se concentró en la calle médico Paz García, en las inmediaciones del campo de fútbol por donde pasa el regato afluente del río Umia. Allí recibieron las primeras indicaciones para la realización del estudio sobre este regato, ya que a cada alumno se le entregó una ficha a cubrir durante la inspección del cauce fluvial.
Al otro lado de la calle estaban esperando los técnicos de la Xunta de Galicia que aportaron los aparatos para la práctica de la pesca eléctrica; un sistema que se utiliza para poder capturar a los peces, estudiarlos y devolverlos a su hábitat natural sin que sufran ningún tipo de traumas.
Este método se utiliza en especial en los casos de muestreos de peces de especies pequeñas, y en hábitat con poca profundidad, siendo bajo esos requerimientos muy efectivo, al permitir cuantificaciones por pulsos eléctricos. Por este motivo es utilizado en investigaciones donde se correlacionan comunidades de peces con las características ambientales de su medio.
Ya en el agua, los técnicos especialmente equipados introdujeron un ánodo y un cátodo para producir un campo de corriente eléctrica que hace que los peces entren en un tipo de parálisis que facilita su captura mediante redes. Se capturaron varias anguilas y truchas de diversos tamaños que fueron depositadas en un cubo con agua para su análisis con el fin de estudiarlas y devolverlas al regato.
