Con el buey de mar, que también se puede capturar desde hoy en la provincia, ocurre algo parecido, aunque no cabe duda de que se trata de una especie con menor presencia en la costa gallega y que suele encontrarse a mayores profundidades que el centollo.

En realidad, tal y como explica la Consellería do Mar, el buey "no es objeto de una pesquería específica, sino que constituye una especie acompañante capturada con artes que tienen como objetivo otros crustáceos", como puede ser el centollo.