El alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, arremetió ayer contra el proyecto de construcción de un centro comercial en los antiguos terrenos de la fábrica de Megasa, alertando de que su construcción va a suponer el colapso viario de todo el entorno de As Carolinas. Para ello se basa en un informe técnico de movilidad realizado por el propio Concello de Vilagarcía y que esta administración "no ha presentado a la Xunta, algo de lo que deberán dar una explicación los responsables políticos" del municipio vecino. En cese informe, continúa Durán "se asegura que se va colapsar la avenida de As Carolinas porque las otras alternativas que presenta el proyecto son ficticias; ni la salida norte ni la oeste existen, siendo el único camino la zona sur, donde se encuentra esta avenida".
Durán se pregunta "cuáles son los motivos que llevan al Concello de Vilagarcía a no remitir este informe", una decisión que se viene a sumar "a las múltiples irregularidades que algún día tendrán que ser explicadas por alguien". Ese informe se solicitó hace un mes, continúa "y en el Concello de Vilagarcía todavía no han sido capaces de remitirlo a la Xunta para incorporarlo al expediente de la licencia comercial".
Espera que la Xunta sea la que realice un informe sobre la movilidad, ya que "está claro que los promotores de la obra saben que incumplen; deben ajustarse a la legalidad, porque este Concello va a estar vigilante en todo momento y analizaremos toda la documentación para evitar que se puedan registrar posibles tratos de favor para con este proyecto".
Incumple
Mantiene el regidor vilanovés que el proyecto del centro comercial vilagarciano es "ilegal" ya que "incumple varios preceptos, el primero de ellos es el uso; si bien es cierto que entre sus usos está el de área comercial, el primero es industrial, por lo que no podría asumir una gran superficie".
El Concello de Vilanova es una de las administraciones que ha presentado alegaciones al proyecto de creación de un área comercial en los terrenos de la antigua fábrica de Megasa. En total, han sido 219 las alegaciones que se encuentran encima de la mesa de la Dirección Xeral de Comercio, que se ha comprometido a analizarlas y que las tendrá en cuenta a la hora de resolver el procedimiento.
De forma paralela, la Consellería de Medio Ambiente está desarrollando la tramitación ambiental del proyecto para ver si cumple de forma adecuada.
