El episodio tóxico iniciado hace unos días en las rías gallegas mantiene cerrados veinte de los cincuenta polígonos bateeiros dedicados al cultivo de mejillón en Galicia. Existen muchas posibilidades de que los cierres por presencia de toxinas lipofílicas vayan en aumento en próximas semanas, y esto es lo que obliga a intensificar el ritmo de descargas.

Aunque como se explicaba hace unas jornadas, a estas alturas de la campaña ya es poco el mejillón comercial que queda por colocar en el mercado, también es verdad que aún hay suficiente producto para atender los pedidos, sobre todo gracias a la excelente calidad que presenta la vianda.

Es esto lo que provoca escenas como las vividas ayer en Vilanova de Arousa, donde hubo momentos a lo largo de la mañana en los que llegaron a reunirse quince camiones cargando molusco sin cesar con destino a los mercados de fresco (depuradoras) e industria transformadora (cocederos y conserveras).

La imagen que ofrecía el muelle vilanovés a media mañana se repetía en otros puertos de la ría arousana, y en otras rías.

El ajetreo, la entrada y salida constante de barcos, las grúas que no dejaban de descargar mercancía llamaban poderosamente la atención de no pocos curiosos, quienes destacaron el ritmo frenético al que estaba trabajando el sector.

Y lo sucedido en Vilanova no es extraño, pues aunque hay que insistir en que ya queda poco mejillón disponible, no es menos cierto que la ría de Arousa aún tiene abiertos veinte polígonos bateeiros, puesto que los únicos cerrados son los cuatro de Meloxo (O Grove).

Mucho peor están las cosas para los productores en la ría de Pontevedra, donde a última hora de ayer únicamente permanecía abierto el Portonovo A, manteniéndose la prohibición de extracción en los Cangas A, Cangas B, Bueu B, Bueu A2, Bueu A1, Portonovo B y Portonovo C.

Asimismo, los análisis efectuados por el Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino (Intecmar) en aguas viguesas obligan a mantener cerrados los polígonos Cangas F, G, H, C y D, por lo que siguen operativos el Cangas E, el Vigo A y los cinco polígonos de Redondela.

En cuanto a la ría de Muros-Noia, continúa con dos polígonos abiertos (Noia A y Muros C) y otro dos inoperativos (Muros B y Muros A).

Infaunales

Por otra parte, la situación sigue siendo buena para los mariscadores, ya que están abiertas todas las zonas de Galicia, a excepción de dos en Vigo, para la extracción de infaunales, es decir, los que viven enterrados en el substrato, como la almeja, el berberecho, la navaja o el longueirón.