Los padres de algunos de los 13 niños matriculados este curso en la guardería del Hospital do Salnés barajan llevar a los juzgados el cierre del servicio, previsto para el 31 de este mes. Otra de las medidas de protesta que acordaron en una reunión improvisada que celebraron ayer a las puertas del mismo centro es la interposición de reclamaciones ante Consumo.

La Consellería de Sanidade sacó a concurso este año la explotación de la escuela infantil, ubicada en el primer sótano del hospital, pero ha quedado desierto. La empresa Cativos, que es la que está gestionando las instalaciones en la actualidad, no se presentó, y la única firma que lo hizo, "Aurora, Pilar y Ana" -concesionaria de la guardería en el Hospital do Barbanza- se echó finalmente atrás. Al parecer, la Xunta de Galicia ha eliminado la subvención por niño que daban hasta ahora, y las empresas consideran que sin ayuda pública esa guardería dará pérdidas.

La decisión ha cogido por sorpresa a los padres, que se enteraron del cierre inminente de las instalaciones a primera hora de la mañana de ayer a través de los periódicos. Están muy molestos, pues se encuentran en la tesitura de buscar una escuela donde les admitan a sus niños cuando la mayoría de este tipo de centros ya tienen todas sus plazas cubiertas desde principios de septiembre. Además, ya han pagado el material escolar que en teoría iban a utilizar durante este curso en el Hospital do Salnés.

Los progenitores explican que en algunos casos renunciaron a plazas que tenían en otros centros, como la guardería municipal de A Lomba, porque en el Hospital les dijeron en su día que, como mínimo, el servicio se mantendría este curso. Así las cosas, consideran que el cierre les origina un perjuicio muy importante y que incluso podría ser ilegal, de ahí que algunos de ellos se hayan puesto en contacto con abogados.

La escuela infantil "Mafalda" abrió sus puertas en enero de 2005, y en estos momentos contaba con 13 alumnos matriculados, aunque su capacidad es de 25. El servicio no es solo para los niños cuyos padres trabajan en el Hospital. De hecho, en la actualidad son usuarios de la escuela "Mafalda" padres que trabajan en alguna de las numerosas empresas de la recta de Rubiáns, o que viven en esta parroquia de Vilagarcía.

Una de las madres afectadas es Araceli Laya, una médico del Hospital do Salnés que tiene a sus mellizos de dos años en la escuela infantil, ubicada en el primer sótano del centro sanitario. "Los padres estamos muy sorprendidos porque nos enteramos del cierre esta mañana (por ayer) a través de la prensa", declara.

Se queja de que "nos encontramos con que quieren cerrar la escuela dentro de diez días sin previo aviso", y adelanta que no se va a quedar de brazos cruzados. "Voy a poner el caso en conocimiento del sindicato y de una abogada", avanza. Así las cosas, es previsible que la polémica también se aborde en la junta de personal del Hospital.

Araceli Laya cuenta que a ellos les dijeron en mayo que la Xunta iba a sacar a concurso la explotación de la guardería, por lo que ella también solicitó plaza en la escuela infantil municipal de Vilagarcía. Y la obtuvo para los dos niños, pero más adelante le dijeron que podía quedarse tranquila y que la guardería "Mafalda" se mantendría como mínimo hasta el verano de 2016, por lo que renunció a las dos plazas en A Lomba.

La médico tampoco acaba de asumir el argumento de la empresa de que la explotación de "Mafalda" ya no es rentable económicamente. "Puede ser que este año sean pocos niños, pero el curso pasado tuvieron 25", que es el máximo que puede albergar este servicio.

Otra madre afectada es Ana María Gómez, una vecina de Rubiáns que trabaja en una empresa de Caldas de Reis. "Yo no tengo ningún plan B porque cuando fue de hacer la matrícula en el Hospital me dijeron que no íbamos a tener ningún problema, que si no era esta empresa la que gestionaba la escuela que habría otra. Y como ya tuve otros tres niños en esta guardería y estoy muy contenta porque funciona muy bien y las trabajadoras son muy profesionales decidí quedarme aquí", por lo que matriculó a su niña de dos años en el centro del Hospital.

Su petición a la administración autonómica es que mantenga abierta la escuela infantil "Mafalda". "El año pasado también había pocos niños al principio de curso, y después se fue anotando gente. Lo que ocurre es que hay falta de información, y mucha gente desconoce que puede venir a esta guardería aunque no tenga nada que ver con el Hospital".

La Consellería de Sanidade declinó ayer hacer nuevas valoraciones sobre esta polémica, después de plantear el lunes que el cierre se produce "porque la guardería ya no le es rentable a la empresa", en palabras de un portavoz del departamento que dirige Jesús Vázquez Almuíña. El Ayuntamiento de Vilagarcía, por su parte, confía en que la Xunta convoque otra vez el concurso para no perder el servicio.

Los padres pagan en torno a 200 euros al mes por el servicio.