La masiva afluencia de aficionados al torneo durante el fin de semana sorprendió incluso a la propia organización. Se dieron casos de gente que no pudo entrar en la misma puerta de Fexdega debido a que todo el aforo estaba vendido.

Bacariza señaló que "el sábado nos hubiesen hecho falta casi quinientas plazas más. Yo mismo atendí muchas llamadas el sábado por la mañana solicitando entradas, pero ya estaba todo vendido desde hace días". Respecto a la procedencia de los aficionados, además de llegar desde diferentes puntos de toda Galicia, también lo hicieron de lugares como Barcelona, León y Asturias.

También el cuadro femenina suscitó una gran atención. Las instalaciones de Condesa Sport en Caldas se quedaron pequeñas para dar cabida a la gente que allí siguió tanto las eliminatorias previas como hasta la ronda de semifinales.