Aunque las cocinas dejaron de funcionar el Día del Pilar, oficialmente la Festa do Marisco no terminó hasta ayer, cuando se celebró en la isla grovense de A Toxa el tradicional congreso anual de palilleiras que impulsa la asociación Mulleres Rurais Adro Vello.
Dado que este año, en contra de lo que solía ser habitual, las jornadas de exaltación del centollo que comienzan en noviembre no se incluyeron en el programa de actos de la Festa do Marisco, fue la convención de palilleiras de ayer la que supuso el punto final del evento gastronómico.
Y se trató de una despedida por todo lo alto, ya que fueron cerca de cuatrocientas las palilleiras llegadas de diferentes puntos de Galicia las que se reunieron en el Palacio de Congresos y Exposiciones de A Toxa, siendo preciso recurrir nuevamente a estas instalaciones -pagando el correspondiente alquiler al Gran Hotel La Toja- porque O Grove carece de auditorio.
La "Palillada Festa do Marisco", que alcanzó su quinta edición, reunió a una veintena de palilleiras grovenses pertenecientes a Adro Vello y la escuela Bolillos, pero también a diez integrantes de la asociación A Floriña y nueve de Corón, en lo que respecta a Vilanova; además de catorce de la Asociación Artesanal de Palilleiras de Valga, 29 integrantes de Abiñadoira (Sanxenxo) y 17 de Cambados.
Eso en cuanto a la comarca de O Salnés y Ullán, pero hay que insistir en que llegaron hasta A Toxa desde mucho más lejos, como por ejemplo 10 de A Feitiña, 25 de Arte y Filigrana y 18 de la asociación O Chopo, las tres en Pontevedra; además de 9 de la asociación As Nosas Rúas y 37 de Bolillos María Jesús, en Vigo
Puede citarse, asimismo, a ocho de Os Amigos de Camposancos, seis de Terras de Rosalía (Rois), 15 de Mulleres Ría de Noia y 22 de Avante Portonovo.
También Marín estuvo presente, con 16 integrantes de Bolymar; como Mos, con 30 palilleiras; y Redondela, con ocho. Se les sumaron cincuenta participantes de diferentes procedencias agrupados en la asociación Bolboreta.
María Isabel Piñeiro, presidenta de Adro Vello, sostiene que "fue un éxito, pues a las 400 que estuvimos trabajando se sumaron unas 300 personas mirando". Destaca igualmente el interés despertado por la exhibición de "malla" realizada por una "mallera mayor" llegada de Luanco y la celebración de un taller de "frivolité".
