La ejecutiva local del Partido Socialista de A Illa de Arousa convoca mañana a toda su militancia para analizar en profundidad las conclusiones del encuentro mantenido el pasado martes con los secretarios provincial y autonómico, Santos Héctor y Pilar Cancela. El objetivo de este encuentro es continuar con el diálogo que se ha abierto a raíz de la crisis del partido y trasladarles la propuesta de mejorar la cohesión comarcal, que en la actualidad no existe.

La asamblea de militantes es la que tiene la última palabra, ya que esta aprobó la pasada semana la dimisión de toda la ejecutiva, excepto el secretario local, a expensas de los resultados que ofreciese el encuentro con la cúpula del partido.

En A Illa existe un importante malestar por cómo está funcionando la formación a nivel comarcal y temen que ese funcionamiento le acabe pasando factura al partido si no se soluciona lo antes posible.

Estas deficiencias en el funcionamiento interno fueron las que acabaron por provocar la rebelión, que se ha gestado en A Illa, pero que ya afecta a otras agrupaciones de la comarca de O Salnés, caso de Ribadumia, que se han sumado a las alertas de estructurar el partido en la comarca.

Desde la formación isleña son conscientes de que los estatutos del partido no contemplan una estructura comarcal, pero creen que es necesaria para evitar que el partido acabe naufragando en el futuro.

Ese mensaje fue el que se le trasladó a la cúpula en la reunión del pasado martes, arrancando el compromiso de que analizarán medidas para cohesionar mejor la formación en O Salnés y dar mayor protagonismo a las agrupaciones de los concellos pequeños.

Por este motivo, el pasado día 6, los siete integrantes que acompañan a Manuel Vázquez en la ejecutiva local del PSOE presentaron su dimisión, una decisión que se sometió a la asamblea el viernes, recibiendo el respaldo de la militancia, siempre supeditada a lo que ocurriese en un encuentro con la cúpula del partido.

La situación es bastante crítica, ya que gran parte de la militancia está dispuesta a abandonar décadas de pertenencia al Partido Socialista por el "ninguneo" al que se consideran sometidos.

La reunión del pasado martes ha sido una primera toma de contacto que se va a volver a repetir en el futuro con el ánimo de acercar posturas y trabajar para "hacer más fuerte el partido", explicaban ayer desde la ejecutiva local isleña.