Los efectivos de la Guardia Civil de toda la comarca celebraron con misas y un vino español el día de su patrona, la Virgen del Pilar, aunque el acto central tuvo lugar en Vilagarcía de Arousa. Este año, debido al estado de deterioro del cuartel, el acto tuvo que trasladarse al recinto de Fexdega. El alcalde, Alberto Varela, comprometió públicamente la realización de gestiones para conseguir mejores instalaciones en la ciudad con destino a este cuerpo armado.

Tras la misa en recuerdo de los efectivos fallecidos, que tuvo lugar en la iglesia parroquial, el acto oficial del día del Pilar comenzó en Fexdega con la entrega de condecoraciones a seis agentes del instituto armado. Cinco de estas distinciones fueron la Cruz de la Orden del Mérito, con distintivo blanco, que recibieron José Miguel Espín Veiga (del cuartel de Valga), Javier Sánchez Codina, Manuel Antonio Bouzas Díaz y Juan José Rey Roca (del cuartel de Cambados) y Ángel Andrés Mosquera Casado (de la Patrulla Fiscal de Vilagarcía). A este último le impuso la medalla su padre, Ángel Mosquera, también miembro de la Guardia Civil.

El capitán José María Rancaño Fernández, que acredita 43 años de servicio y numerosas condecoraciones, recibió ayer de manos del anterior responsable de la Cuarta Compañía de Vilagarcía, Lorenzo Santos Falagan, la Cruz de Plata. "Sé que esta medalla la has recibido por tu labor. Eres el guardia civil más condecorado", declaró Santos Falagan en el acto de entrega de la distinción.

José María Rancaño, en su calidad de anfitrión, expresó la voluntad de los miembros del cuerpo armado en reafirmar sus votos de servicio y destacó los buenos resultados obtenidos en los dos últimos años. "Conseguimios reducir un 13% el índice de delincuencia en los dos últimos años, lo que nos sitúa en un 20% menos que la media nacional y también estamos por debajo de las medias gallega y provincial en la estadística de delincuencia. Os invito a continuar en la misma línea de conducta", apuntó el responsable de la Compañía.

Rancaño reconoció que los medios materiales son escasos y cada año más viejos y que también han sufrido recortes de personal. Pero el problema mayor es el estado del cuartel de Vilagarcía, en el que aún viven algunos efectivos a pesar de su gran deterioro.

El nuevo alcalde fue invitado a conocer el estado de las actuales instalaciones del cuartel de Vilagarcía en una visita institucional que se celebrará en breve.

Alberto Varela entiende que el deterioro del inmueble es ya visible desde el exterior, por lo que ha comprometido públicamente las gestiones necesarias ante la administración del Estado para conseguir que se lleven a cabo las obras de ejecución del proyecto para el nuevo cuartel de la Guardia Civil de Vilagarcía en terrenos cedidos por el Concello en la zona de Fontecarmoa.

El regidor municipal recordó que el grupo socialista en el Congreso presentó una enmienda a los Presupuestos Generales del Estado para que se incluya la partida presupuestaria con destino a estas obras. Se trata de un proyecto que lleva años paralizado, a pesar de que en su momento contaba con partida presupuestaria. La crisis económica frenó su ejecución y desde entonces no se ha vuelto a incluir en los sucesivos planes de inversiones.