El alcalde de Vilagarcía, Alberto Varela Paz, confirmó ayer que el Concello está tramitando una modificación puntual del Plan Xeral de Ordenación Municipal, PXOM, para agilizar la recalificación urbanística de unos terrenos adquiridos por empresas vinculadas al Puerto. El objetivo del nuevo expediente urbanístico es la construcción de unas naves para el almacenamiento de graneles sólidos, especialmente cereales, que actualmente se depositan en las instalaciones concedidas en precario en el muelle de O Ramal.

En esta rada, situada entre el puerto deportivo y las playas de A Concha y Compostela, la Autoridad Portuaria planifica un cambio de uso, y el Concello de Vilagarcía ha puesto sus miras ya que pretende que se amplíe la zona lúdica relacionada con los arenales y el paseo marítimo.

De momento el muelle de O Ramal mantiene la actividad industrial con todas las autorizaciones en precario hasta que se decida su destino definitivo.

La Autoridad Portuaria reconoce que la actividad comercial e industrial de sus muelles está centrada en los muelles de la zona de Ferrazo y Comboa, hasta donde llevará la línea del ferrocarril para el transporte de las mercancías que se cargan y descargan en estas radas. Sin embargo, puntualiza que como empresa pública está obligada a rentabilizar todas sus instalaciones, incluido el muelle de O Ramal.

El uso, aún sin definición

El plan de cambio de uso de O Ramal no es nuevo. De hecho en el Puerto figuran varios diseños, encargados por distintos equipos directivos, entre los que figuraba hasta la creación de una estación marítima. A pesar de ello, el destino de este muelle está sin definir.

El proceso de cambio de la rada tuvo que esperar a que se produjera la caducidad de las concesiones. Desde entonces, el uso de las naves allí instaladas fue autorizado en precario.

En una de las que almacena cereales se produjo hace unos meses un accidente, al chocar un camión con uno de los pilares, que produjo el derribo de una gran parte de la cubierta.

Esta situación puso de manifiesto el problema de las empresas usuarias de la rada que han comprado terrenos para trasladar su actividad en unas parcelas próximas al recinto portuario, en la zona de Ferrazo, al pie de la carretera que va a Vilaxoán, ya que llevan varios años intentando obtener la calificación urbanística que les permita construir sus naves. Ahora el problema parece que está en vías de solución a través de la modificación puntual del PXOM.