El Concello justificó ayer la adjudicación del servicio de cafetería de la Festa do Marisco diciendo que el concurso "permitía que cualquiera pudiera presentarse" y que "por primera vez el adjudicatario deberá aportar 6.000 euros al Concello". Esa es la cantidad ofertada por Francisco Álvarez, que superó a los 4.000 euros prometidos por Alfonso Mourelos y los 3.711 que se comprometía a dar Alfonso Padín, cuya oferta fue la peor valorada. Mientras, el montaje de las carpas y el simposio de escultura siguen su curso.