La Escola Marexada tocó a su fin en la tarde de ayer con un emotivo acto de clausura a dos meses de intenso trabajo. El grupo de profesores y monitores formado por Esperanza Gómez, Thais Núñez, Miguel Piñeiro y Laura Castro vieron recompensado su buen trabajo con el reconocimiento de un amplio número de padres y alumnos que no quisieron faltar a la cita.

El edificio del concello alberga desde ayer una exposición con muchos de los trabajos realizados por los alumnos de entre 3 y 10 años de edad desde el pasado mes de julio. Talleres con cuatro contenidos sirvieron de eje para trabajos de inteligencia emocional, igualdad, medioambiente y defensa animal o diversidad funcional.

El objetivo no era otro que potenciar la sensibilidad de los alumnos hacia aspectos poco trabajados en la rutina habitual de un curso escolar. El desarrollo de la empatía con personas con diferentes tipos de discapacidad fue una de las herramientas utilizadas por los profesores, con el objetivo de familiarizarse con el civismo y la comprensión sobre diferente problemáticas físicas a través del contacto directo con las mismas.

El colofón al acto de despedida de esta edición de la Escola Marexada fue el estreno de una canción cantada en lengua de signos. Se emitió un vídeo con la participación de los alumnos que despertó una sonora ovación en el salón de plenos del Concello de A Illa.

El buen sabor de boca a más de dos meses de intensa actividad parece dejar el camino expedito para que Marexada tenga nuevos episodios educativos coincidiendo con las pausas escolares en A Illa.