Las fanecas bravas suelen actuar en playas como A Lanzada, donde cada verano era preciso atender a un par de miles de usuarios afectados por los pinchazos de este pez. Sin embargo, en agosto pasado únicamente se registraron 120 casos ligados a las picaduras de esta faneca, tal y como explica Adrián Lijó desde la agrupación de Protección Civil.

El importante descenso de casos ya se había registrado en julio, como se explicó en su momento, lo cual permite concluir que o bien las fanecas bravas están menos presentes en arenales como A Lanzada, que lo visitaron menos bañistas o que estos están más concienciados con el problema y toman las precauciones necesarias.

Esas 120 atenciones por picaduras de faneca son solo una pequeña parte del trabajo que realiza la Unidad Marítima de Salvamento y Rescate de O Grove, que el mes pasado prestó alrededor de 580 atenciones, de las cuales 559 correspondieron a usuarios españoles.

Junto a ellos tuvieron diferentes problemas que hicieron precisa la intervención de los socorristas de las playas con bandera azul tres alemanes, cuatro franceses, dos portugueses, tres suizos... Y es que en esta emblemática zona de baño se dan cita usuarios llegados de diferentes partes del mundo.

Respecto a la procedencia de los bañistas españoles atendidos, hay que decir que 137 eran pontevedreses y 129 llegaron a O Grove desde Madrid, situándose muy por encima de los coruñeses atendidos (80 casos), ourensanos (38), asturianos (19) y leoneses (17).

Respecto a otras procedencias, pueden citarse Badajoz, Barcelona, País Vasco, Cáceres, Córdoba, Guadalajara, Lérida, Melilla y Teruel, entre otros lugares.

Las atenciones más comunes, además de las relacionadas con las fanecas bravas, tienen que ver con las heridas de todo tipo (266), picaduras de insectos (59), golpes y contusiones (41), irritación de ojos (26 casos), quemaduras (9), lipotimias (4), fracturas (3) y similares. La Unidad Marítima de Salvamento y Rescate, que tuvo que remolcar dos embarcaciones a la deriva, también rescató a un bañista, realizó cinco operativos de búsqueda de personas y utilizó en dos ocasiones la silla anfibia para personas de movilidad reducida.