A diferencia de 2013, cuando incluso fue preciso cerrar playas debido a la presencia de una especie tan peligrosa como la carabela portuguesa, tanto 2014 como el presente ejercicio se caracterizan por una ausencia generalizada de medusas en el agua y las zonas de baño.
Es cierto que en los últimos días llegaron algunos ejemplares a las playas arousanas, especialmente en Vilanova, pero todo parece indicar que son apariciones esporádicas que no preocupan en exceso.
Hay que tener en cuenta que la presencia de medusas en las playas está estrechamente ligada a la climatología, y muy especialmente a los años lluviosos.
Los ríos, alimentados por las escorrentías cuando llueve copiosamente, trasladan aportes de nutrientes al mar y lo hacen más productivo e interesante para las medusas, pues los residuos arrastrados actúan como abono y suponen un buen caldo de cultivo para la especie, tal y como apuntan en el Instituto Español de Oceanografía (IEO). Muy por el contrario, en años secos se reducen esos aportes de nutrientes y las medusas tienen menor presencia en el interior de las rías.
IEO
Uno de los investigadores del IEO, Ignacio Franco, explica que "estamos abonando el mar con las aguas de escorrentía cargadas de abonos agrícolas y con aguas de origen urbano ricas en detergentes y demás tipos de materia orgánica, lo cual hace que proliferen las plantas marinas, el fitoplancton, lo que a su vez hace que se dispare el número de los organismos que se alimentan de este fitoplancton".
Las medusas "se alimentan de microzooplancton y de algunas larvas de peces, pero las hay incluso que tienen algas en simbiosis y pueden asimilar directamente los nutrientes del agua a través de estas algas; son organismos que por su ciclo biológico están muy bien adaptados para aprovechar estos incrementos del alimento a su disposición".
Sobrepesca y tortugas
E incluso la sobrepesca puede permitir la aparición de más medusas, ya que "hemos conseguido disminuir drásticamente las poblaciones de muchas especies de peces que son competidoras por el alimento con las medusas, y ahora les hemos dejado vía libre". Eso sin olvidar "el descenso de las poblaciones de predadores como las tortugas", que son el principal enemigo de las medusas.
Sea como fuere, el hecho de que el presente verano no resulte excesivamente lluvioso puede explicar la escasez de medusas en las playas arousanas, y un buen ejemplo de ello es que durante el mes de agosto la Unidad Marítima de Salvamento y Rescate que actúa en las playas de O Grove con bandera azul solo tuvo que intervenir en veinte ocasiones debido a la acción de erizos y medusas, un número muy inferior al registrado en años anteriores.
