Muy malas sensaciones deja la primera jornada de extracción del pulpo. Así lo reconocía en el día de ayer, el patrón mayor de Cambados, Ruperto Costa, tras analizar los resultados con el sector en una primera jornada que no se caracterizó por el número de capturas. De hecho, los cálculos que realizaba el sector es que en esta primera jornada de trabajo se pescaron 600 kilogramos menos que el año anterior, es decir, menos de la mitad que en aquella primera jornada. Lo único bueno de esta jornada han sido los precios, especialmente la "cantada" más alta, que se cerró a 8,35 euros, cantidad un tanto engañosa y que se sustenta en la escasez de producto que se registró en la lonja cambadesa. El precio más bajo fue de 4,70 euros el kilogramo.

"Es cierto que las condiciones en las que se encontraba el mar no eran las mejores para las nasas, pero la impresión que sacan los marineros es que esta campaña no va a ser precisamente muy buena", explica el patrón mayor cambadés. Que la temporada no va a ofrecer buenos resultados para la flota de la nasa es algo que el sector tiene relativamente asumido desde hace bastante tiempo, algo que también puede ocurrir con la nécora, que no se subastará en la lonja cambadesa hasta mañana. De todas formas, esperan que los resultados puedan ir mejorando a medida que avance la campaña.

En lo que respecta al camarón, la lonja de Cambados va a volver a acoger la subasta de esta especie para facilitar a la restauración del municipio la consecución de "este producto de calidad cuya supervivencia fuera del agua es muy limitada".

En el muelle de Cambados existe una veintena de embarcaciones con permex para la utilización de nasa de pulpo, nécora y camarón que ayer comenzaron a faenar en esas artes tras la puesta en marcha del plan de explotación.

Las embarcaciones dedicadas a la captura del pulpo deben cumplir una serie de requisitos, como son la de que cada individuo capturado debe tener un mínimo de un kilogramo de peso, y ningún barco puede sobrepasar los 30 kilogramos diarios por cada tripulante enrolado a bordo, hasta un máximo de 210. El plan permanecerá abierto hasta el próximo 30 de septiembre, pues a partir de esa jornada, la cuota máxima será de 50 kilogramos por embarcación y día, con otros 50 por cada tripulante hasta alcanzar un máximo de 350. Las nasas solo pueden emplearse en horario diurno y este año se ha estrenado un chip de identificación y control que sirve para saber quien es el propietario de esas artes.