Aunque como es habitual los precios de las diferentes especies de peces y mariscos suelen subir en Navidad, puede decirse que en las pasadas fiestas las tarifas máximas de un buen número de productos resultaron mucho más asequibles que en 2013, es decir, que la cesta de la compra se encareció como hace siempre, pero no tanto como otras veces.

La almeja babosa, sin ir más lejos, se mantuvo prácticamente igual que un año antes, pero la fina y la rubia se vendieron en lonja el mes pasado a cuatro o cinco euros más baratas que en diciembre de 2013.

También bajaron las cotizaciones máximas del centollo, que pasó de un tope de 53 euros el kilo en diciembre de 2013 a 47 euros en diciembre de 2014; el rodaballo, que bajó de 53 a 40 euros; la nécora, que de 113 descendió hasta lo 90 euros; y el camarón común, que en 2013 había marcado 188 euros el kilo, frente a los 139 de las pasadas fiestas.

Mención especial merece el percebe, una de las grandes referencias de Galicia en cuanto a cotizaciones altas. Este preciado marisco alcanzaba en diciembre de 2013 los 283 euros el kilo, mientras que el mes pasado se quedó en 254.

Sea como fuere, hay excepciones, pues es cierto que algunos productos concretos se encarecieron en lonja. Un ejemplo claro es el del berberecho, que de un tiempo a esta parte brilla por su ausencia.

La escasez de este bivalvo hizo que cotizara en diciembre a más de 20 euros, cuando en el mismo mes de 2013 no había llegado a los 18 euros por kilogramo.