El Ayuntamiento de Cambados redistribuirá el alumbrado de Navidad después de que el presidente de la asociación de comerciantes, Juan Rey transmitiera al alcalde su opinión de que la iluminación en algunas calles del centro resultaba un poco pobre.
A este respecto, el Concello de Cambados apuntó ayer que se colocarán más arcos en las zonas del rural, así como un tercer árbol gigante. Éste irá delante de la escalinata de San Tomé (y el asilo), con lo que se mejorará la ornamentación en este barrio cambadés.
El alumbrado de Cambados se inauguró a primera hora de la tarde del viernes pasado con la presencia del alcalde, Luis Aragunde y del presidente de Cambados Zona Centro, Juan Rey. Éste último explica que por la noche dio un paseo y que vio que la iluminación en algunas calles era pobre, como por ejemplo la avenida de Madrid o San Francisco, que es la que pasa por delante de la iglesia.
Le transmitió esta opinión a Aragunde, y éste se ha comprometido a redistribuir el alumbrado para intentar corregir en la medida de lo posible estos defectos. Eso sí, el regidor apunta que tendrán que ajustarse a dos límites: el presupuesto existente y que haya en las calles postes o farolas que permitan la colocación de los arcos.
El Ayuntamiento de Cambados asume desde hace un par de años la totalidad del gasto del alumbrado de Navidad. Tradicionalmente, la administración municipal corría con el coste de la iluminación delante del Ayuntamiento, en las calles con menor presencia comercial y en el rural, mientras que la asociación de comerciantes costeaba el resto.
Posteriormente, Zona Centro dejó de asumir ese gasto a consecuencia de la crisis y la merma de ingresos a través de subvenciones y cuotas de los socios, y durante un par de años los comerciantes de determinadas calles se unían entre ellos para pagar el alquiler de los arcos en sus respectivos viales.
Pero esta fórmula tampoco terminó de cuajar, y el equipo de Luis Aragunde optó finalmente por asumir todo el gasto, evitando así a los comerciantes esta inversión. Así, el personal del Concello construyó varios arcos para rebajar el coste en alquiler, aunque eso no impidió que el Ayuntamiento siguiese alquilando parte del alumbrado.
Lo más novedoso de la decoración de esta Navidad son los dos árboles luminosos instalados en las plazas Ramón Cabanillas (junto al Baco de Paco Leiro) y del Concello. Algunos se han mostrado críticos con esta ubicación al considerar que los dos árboles están casi pegados, y que se podría haber colocado uno de ellos en el barrio de Fefiñáns.
