Viticultores y bodegueros saben que atraviesan momentos decisivos. La viña ya no soporta más agua, la uva se expone a pudrirse y tanto las cajas como depósitos, tractores y todo el material necesario para la vendimia están preparados, a la espera el comienzo urgente de esta actividad.

Si "levanta el tiempo" la recolección puede empezar de manera inmediata. Tanto que algunos productores, sobre todo en pequeñas plantaciones, incluso bajaran iniciar mañana los trabajos de recolección, "porque ya nos podemos arriesgarnos a seguir esperando; si viene más lluvia se pudrirá toda la uva, así que empezaremos a recogerla en cuanto salga el sol", argumentan.

Diferentes bodegueros consultados sostienen que, "por el momento, no hay nada perdido, y si bien es cierto que ya llovió demasiado y que empieza a aparecer la botritis en los racimos, la cosecha todavía puede salvarse". Otra cosa bien diferente, insisten, sería que las lluvias continuaran unos días más, "pues en ese caso habría que empezar a asumir pérdidas importantes de producción".

Las espadas están en todo lo alto, las diferentes predicciones meteorológicas anuncian un paréntesis en las precipitaciones y el sector quiere aferrarse a esa probabilidad de cielos despejados para dejar secar el agua de las plantas y los racimos, con el propósito de empezar a recogerlos a partir del miércoles en el conjunto de la subzona productora de O Salnés, la más importante de la Denominación de Origen Rías Baixas.

Meteogalicia

Por si sirve para despejar dudas, tanto a los viticultores como a los bodegueros y a todos aquellos que directa o indirectamente van a participar en la inminente vendimia, hay que indicar que Meteogalicia anunciaba ayer que "en la próxima semana Galicia entrará en un área anticiclónica en superficie, pero en los primeros días se mantendrá aún el aire frío como herencia de la borrasca que nos afectó durante la semana". Así las cosas, "entre lunes y miércoles el tiempo vendrá marcado por la posibilidad de chubascos vespertinos, pero también por la apertura de grandes claros en muchos lugares y las temperaturas suaves".

Ya a partir del jueves aumentan las probabilidades "de que el aire frío en altura comience a desaparecer y la situación se caracterice por tiempo seco y soleado", lo cual va a beneficiar especialmente a aquellas bodegas que suelen arriesgar más y pueden esperar aún otra semana antes de iniciar la recolección.