El sector bateeiro gallego sigue avanzando en pro de la unidad de la que adolece históricamente y que todos quieren conseguir, aunque no se pongan de acuerdo en el modo de lograrla. La mejor prueba de ello es que la gran organización que tratan de crear seis entidades productoras de diferentes rías sigue recibiendo adhesiones.

En la reunión celebrada en la noche del miércoles en la sede de la cooperativa Amegrove, en Porto Meloxo (O Grove), participaron también representantes de la Federación Arosa Norte, que aparentemente están interesados en la idea de crear un gran grupo.

Inicialmente Amegrove, Cons do Udra (Bueu), Socomgal (Moaña), Cabo de Cruz (Boiro), Illa (A Illa) y la asociación Proinsa (Sada) trataban de sumar unas 1.500 bateas, y sobre esa idea se trabajó de nuevo en la reunión celebrada en O Grove. Pero a esa cifra pueden añadirse, si finalmente llegan a acuerdo, las alrededor de 200 bateas procedentes de la Federación Arosa Norte.

Esto supondría alcanzar, quizás, la mayor cifra de la historia de bateas reunidas bajo unas mismas siglas -aún por decidir- en un proceso totalmente democrático, dando la oportunidad de integrarse a quien lo desee y sin imponerlo en ningún momento.

De esta forma, finalmente el sector puede quedar configurado, como avanzó FARO DE VIGO en su momento, en tres grandes bloques de producción o, como mucho, en cinco.

Francisco Padín Novas, presidente de la cooperativa Amegrove y por tanto anfitrión del encuentro que tuvo lugar en su sede, confirma el interés de Arousa Norte y reitera que "todo aquel que quiera sumar puede participar en este proyecto".

En cualquier caso, sabe que "hay que dar pasos lentos y firmes" -en este sector en concreto resulta esencial hacerlo así-, pues cualquier movimiento en falso puede dar al traste con los intentos por conseguir esa macroorganización "que sirva para defender nuestros intereses en Galicia y Europa".

El bateeiro grovense que ejerce de portavoz de estas seis entidades que ahora negocian una posible fusión -más adelante se desvelarán los nombres de otras asociaciones que se lo están pensando e incluso se interesaron ya por el proceso- anuncia que además de negociar con productores de mejillón lo hacen con comercializadores y transformadores, es decir, depuradores, cocederos y conserveras, pues se trata de "una parte esencial de nuestro sector y todos debemos estar en el mismo barco".

Francisco Padín no descarta nuevas incorporaciones en próximas fechas, aunque todo va a depender de las próximas reuniones para avanzar en la creación de esta organización y en la fórmula jurídica por la que debe guiar su funcionamiento.

A la espera de acontecimientos, el simple hecho de que continúen estas negociaciones es ya una buena noticia para el sector, o al menos para los interesados en lograr esa unidad que tanto necesita.