El alcalde de Vilagarcía, Tomás Fole; el concejal de Tráfico y Seguridad, Ángel Benito Pérez Dorgambide; y el edil de Medio Ambiente, Jesús Longa, presentaron este mediodía la campaña "Caca, culo, please" con la que el gobierno local pretende que los ciudadanos recojan las deposiciones de sus perros para evitar la suciedad en las calles. Emulando las experiencias con resultado positivo de otras ciudades, el regidor vilagarciano anunció que policías de paisano vigilarán determinados enclaves de la ciudad para poder "cazar" in fraganti a los infractores. Las multas oscilan entre los 30 y los 300 euros. El concejal Pérez Dorgambide también animó a los vecinos a denunciar en la Policía Local los casos que conozcan, pues es la otra única forma de detectar a los propietarios que dejan las heces de sus mascotas en las calles.

Aparte de colocar carteles en distintos puntos de la ciudad, el Concello también buzoneará 10.000 domicilios con trípticos informativos.