El presidente de Portos de Galicia, José Juan Durán, se encontró con una sorpresa en su visita a O Grove para celebrar el izado de la primera Bandera Azul de Galicia. El acto fue aprovechado por dos armadores de la localidad para acercarse y entregarle un rodillo y un bote de pintura, dos elementos con el que expresan su disconformidad con lo que consideran "falta de inversiones" del ente portuario en la dársena grovense, una de las más importantes de la ría de Arousa.

Los armadores llevan tiempo esperando por un encuentro con los responsables de Portos de Galicia para reclamar una serie de actuaciones urgentes que están pendientes de su realización, pero todavía no han sido recibidos. Durán solventó como pudo la reclamación de los armadores, comprometiéndose a mantener un encuentro en el futuro con ellos.

Entre determinado grupo de armadores de O Grove existe un importante malestar con Portos por la ausencia de inversiones en la dársena grovense, en la que se prometió una inyección de sesenta millones de euros y solo se pintó una zona para aterrizar helicópteros.