El juez ha ordenado prisión provisional comunicada y sin fianza para el hombre que arrolló a dos mujeres ayer en Vilagarcía. Le imputan tentativa de homicidio y quebrantamiento de condena, pues tenía dos órdenes de alejamiento de una de las víctimas del atropello.

El tranquilo vecindario de A Torre (Vilagarcía) se vio alterado en la mañana de ayer cuando un residente del barrio se llevó por delante con un coche a dos mujeres y se dio a la fuga, siendo detenido poco después muy cerca del lugar de los hechos, en su casa familiar. Se trata de Juan P.R., de 36 años, que cuenta con dos órdenes de alejamiento impuestas por el Juzgado de Vilagarcía tras varias sentencias en su contra por protagonizar sucesivos actos de acoso contra la familia a la que pertenecen las dos víctimas, M.I.M.C., de 41 años, y M.M.C., de 21. Milagrosamente, las dos hermanas solo sufren heridas de carácter leve y permanecen ingresadas en el Hospital Domínguez de Pontevedra. Hoy ha pasado a disposición judicial.

Los vecinos de la calle Bouza de A Torre se sobresaltaron al oír un fuerte golpe al filo de las nueve de la mañana. Juan P.R. enfiló, según el relato de las propias víctimas a agentes de la investigación, en dirección a las dos mujeres conduciendo un Renault Clio rojo propiedad de un familiar. Estas quedaron atrapadas por la estrechez de la calzada y sin posibilidad de reaccionar, siendo arrolladas con violencia, presuntamente de forma intencionada, por el hombre. Ambas impactaron con el muro de su propia casa, a la que estaban accediendo después de que M.I.M.C. dejara a su hija menor en el colegio.

El conductor se dio a la fuga sin prestarles auxilio y, poco después, apareció en su casa, situada a escasos 300 metros del lugar de los hechos. Allí se encontró con su hermana, a la que dio vanas explicaciones de lo ocurrido, y fue detenido minutos más tarde por los agentes de la Policía Local. Esta familiar, acompañada por sus padres, se personó en la calle Bouza y reconoció a algunos vecinos que efectivamente el autor del atropello había sido su propio hermano.

Asistencia médica inmediata

La ambulancia de Protección Civil llegó rápidamente al lugar del siniestro avisada por los suegros de M.I.M.C., que viven en la casa de enfrente y fueron los primeros en acudir en su auxilio. El equipo de emergencias atendió a las mujeres "in situ", comprobando que la más joven, M.M.C., sufría una preocupante herida en la frente que le sangraba profusamente, mientras su hermana mayor se quejaba de un fuerte dolor en una de sus piernas. En un principio se temió que estuviera fracturada, extremo descartado tras ser evaluada en el Hospital do Salnés, a donde las dos fueron trasladadas en la misma ambulancia. Además de estas heridas, las víctimas se quejaban de diversas contusiones en cuello, extremidades y cabeza. Ya por la tarde, las dos fueron derivadas al Domínguez para recibir un nuevo diagnóstico y recuperarse de sus heridas.

Un infierno de año y medio

El suceso de ayer no era ni mucho menos el primero en el que se veía involucrado Juan P.R., que ya había sido condenado en tres ocasiones por atacar la vivienda de la familia de las víctimas, amenazarlas y agredir al matrimonio formado por Juan Antonio G.Q. y M.I.M.C. El Juzgado de Vilagarcía dictó una primera orden de alejamiento a 200 metros de la mujer y sus dos hijas, de 15 y 3 años, hasta que las dos fuesen mayores de edad. El pasado 19 de mayo, tras protagonizar nuevos incidentes, Juan P.R. fue condenado de nuevo a una orden de alejamiento de cinco meses respecto a M.I.M.C.

Ayer prestó declaración en las dependencias de la Policía Local y Nacional, en donde pasó la noche. Dio negativo en el test de alcoholemia, pero, fuentes próximas al caso, afirman que se le acusa de haber infringido la orden judicial de alejamiento, omisión de socorro y tentativa de homicidio.