Un total de 8.308 pescadores y mariscadores, además de 4.551 empresarios o armadores, constituyen la masa social y el electorado de las 63 cofradías gallegas. Todos ellos -casi 13.000- están llamados a las urnas el día 28 del mes en curso, con el propósito de elegir a cerca de un millar de vocales para integrar las diferentes juntas generales, que a su vez tendrán que formar los cabildos y posteriormente compondrán las federaciones provinciales, para culminar todo el proceso con la constitución de la Federación Gallega de Cofradías.

La convocatoria de este proceso electoral único en todos los puertos, para mandatos de cuatro años, puede servir para poner cierto orden en el sector, pero sobre todo para aumentar las posibilidades de llegar a entendimiento en el momento de pactar planes de explotación, vedas y todo tipo de aspectos relacionados con la actividad diaria.

Es la primera vez que se celebran elecciones en todas las cofradías a la vez, y esto significa que habrá un periodo de estabilidad -o al menos esa es la intención- que puede facilitar cualquier tipo de negociación entre pósitos, o entre estos y la Administración.

A modo de ejemplo, puede decirse que no es lo mismo pactar una veda o un plan de extracción a uno, dos o tres años vista cuando hay un patrón mayor que está a punto de irse o cuando otro acaba de ser elegido, que hacerlo cuando todos saben que tienen el mismo periodo de mandato por delante.

Juan Carlos Maneiro Cadillo, el secretario xeral de Mar, actúa como presidente de la junta electoral designada para estos comicios. Y coincide al explicar que el proceso conjunto en todas las cofradías gallegas debe redundar en beneficio del sector.

"Es un proceso demandado porque ya había acabado el mandato de la mayoría de los patrones y es preciso renovar los órganos de gobierno -reflexiona Maneiro-; pero es que además la Ley de Pesca de 2008, y la modificada de 2009, ya mantuvieron la posibilidad de que se hicieran todos los procesos electorales a la vez".

Así pues, "lo que se persigue es permitir que se renueven de una manera democrática, porque las cofradías son corporaciones de derecho público, y además damos respuesta a una demanda de buena parte del sector, porque muchos patrones solicitaban esta convocatoria a gritos".

Lo que espera la Administración es que las cofradías se renueven a partir de la votación del día 28 "y podamos empezar una nueva etapa, que no tiene por qué suponer cambios radicales, pero que debe consolidar la colaboración del sector con la Administración para organizar mejor la actividad y que los órganos de gobierno de las cofradías ejerzan como interlocutores".

Del mismo modo, el presidente de la junta electoral considera que "esta renovación es importante porque las cofradías son también órganos de representación social; no podemos olvidar que en los pueblos marineros son una entidad con un peso local institucional importante, y desde luego que los patrones se vean refrendados en unas votaciones les da mayor estabilidad y seguridad jurídica".

El propio Maneiro apostilla que la decisión de convocar las elecciones para todas las cofradías a la vez se tomó "pensando en que a continuación hay que elegir los órganos de gobierno de las federaciones provinciales y de la gallega".

Lo que quiere decir es que "cuando no había unidad sucedería que un patrón que iba a marcharse de su cofradía tenía el poder o la posibilidad de elegir al presidente de la gallega o la provincial, a pesar de que al cabo de un mes dejara de ser patrón mayor".

A partir de ahora los patrones electos van a elegir a los presidentes, "pero también van a compartir todo el mandato; a partir de ahora los que van a conformar las federaciones son los que van a continuar en los cargos cuatros años, salvo en situaciones extraordinarias, y por tanto van a estar todos juntos y deben buscar el máximo entendimiento".

También entiende el secretario xeral de Mar que la unificación de procesos puede ayudar a tomar mejores decisiones sobre el funcionamiento global del sector, "pues esas decisiones van a ser tomadas por personas con perspectivas de continuidad en el tiempo; no van a poder decidir y marcharse".

El problema que entraña todo este proceso es que conlleva unos trámites muy complejos, lo cual hizo que se retrasara en el tiempo la publicación de la Orden con la convocatoria, "porque no es sencillo compaginarlo todo y que todos vayan a la par".

A este respecto, Maneiro matiza que "no sería razonable que por cuestión de tramitación de censos o candidaturas se fueran cayendo cofradías durante el proceso y nos encontráramos con que no se puedan celebrar muchas de las votaciones". Pero "de momento no es así y todo va avanzando en tiempo y forma para celebrar la votación el día previsto".

A modo de resumen, el número dos de la conselleira Rosa Quintana argumenta que tanto para su departamento como para el propio sector el actual es "un proceso interesante e ilusionante, por cuanto puede suponer un refrendo para muchos patrones mayores que ya están y un aval para los que lleguen con aires renovados".

Tanto de una forma como otra "se avecina una etapa con savia nueva que favorecerá las relaciones entre el sector y la Administración; todo ello va a enriquecer la labor conjunta que tenemos que afrontar cofradías, federaciones y Administración para lograr lo mejor para el sector, y más teniendo en cuenta que en este momento hace falta tomar decisiones innovadoras para paliar situaciones como la caída de ingresos en las lonjas".

De este modo apuesta por "buscar el modo de revertir esta situación, que desde luego no es la óptima para el sector; hay que ir pensando en dejar atrás la crisis, y para ello tenemos que afianzar las estructuras de gobierno, pues solo así podremos salir adelante y competir con ventaja en el mercado global".

Y eso, renovar y afianzarse, es lo que van a hacer los cerca de 13.000 gallegos llamados a las urnas el día 28. Será en la jornada siguiente cuando la comisión electoral proclame provisionalmente a las personas que formarán la junta general y los vocales de las juntas directivas de las agrupaciones sectoriales.

Unos días después, en el primer pleno de la sesión constitutiva de la junta general, se procederá a la elección del patrón mayor, los vicepatrones y los vocales del cabildo.

Puede decirse que con derecho a elegir 24 vocales para la junta general están cofradías como A Illa, Burela, Cambados, O Grove, Vilanova, Carril y Rianxo, mientras que con 22 vocales aparecen Ribeira, Cabo de Cruz y Pontevedra. Con 20 vocales se sitúan juntas como las de Ferrol, A Pobra y Redondela.

El número va descendiendo, en función del número total de votantes, de tal modo que a Sanxenxo, que solo tiene a 18 personas en el censo, le corresponden una decena de vocales.

Como se había informado en su momento, esos vocales son los que van a dar vida a los nuevos cabildos. Pero también a los órganos mancomunados. Así las cosas, en el primer pleno de la junta general de las cofradías, constituidas por los patrones y vicepatrones mayores, se procederá a la designación de presidente, vicepresidente y componentes del comité ejecutivo de la federación provincial correspondiente.

Los candidatos que se propongan en cada cofradía tendrán que presentar su candidatura inmediata ante el pleno de la junta general, realizándose la votación en la misma sesión.

Según la legislación vigente, en el primer pleno de la junta general de las federaciones provinciales de cofradías de pescadores, constituida por los patrones mayores y los vicepatrones primeros de cada cofradía asociada, se procederá a la elección del presidente, vicepresidentes y componentes del comité ejecutivo.

Este pleno de las federaciones provinciales de cofradías de pescadores tendrá lugar en los quince días siguientes a la constitución de los cabildos de las cofradías, previa convocatoria realizada por escrito por el secretario por orden del presidente saliente de su respectiva federación provincial de cofradías de pescadores.

A posteriori se convocará un pleno para cada federación provincial y se elegirán los vocales que irán al comité ejecutivo de la gallega.