El motoclub "Sentolos Rasing" ha decidido en votación seguir adelante con la concentración mototurística internacional de los días 4, 5 y 6 de julio. La utilización de una mujer ligera de ropa para ilustrar el cartel promocional llevó a esta cita al borde de la suspensión, pero finalmente parece salvarse. Las dos serias advertencias por parte del Concello de O Grove exigiendo la modificación de la imagen, que considera sexista, han llevado a la entidad que preside Yamandú Reboiras a introducir cambios.

La primera modificación del cartel, tapando las nalgas de la joven con un papel adhesivo, tampoco convenció al gobierno local, que amenazó con retirar toda ayuda a dicha concentración motera.

Por esta razón sus integrantes se reunieron y, aunque algunos eran partidarios de suspender la cita -incluido el propio Yamandú Reboiras-, finalmente se decidió que "por respeto a los patrocinadores, a los aficionados a las motos ya inscritos y que vienen desde lejos y a los vecinos de O Grove, para que no se queden sin esta fiesta. Hemos acordado seguir adelante".

Esto significa que van a elaborar un tercer cartel promocional "para eliminar éste que tantos disgustos causa a nuestra concejala de Igualdade -Aida Filgueira- y presentar otro que no le provoque más trastornos, por lo que no habrá ninguna imagen de mujeres en bañador".

Tienen previsto entregar ese cartel a los medios de comunicación en la jornada del viernes, para que salga reproducido ante la sociedad en general al día siguiente, colgándolo también en las redes sociales para atraer al mayor número posible de visitantes durante la concentración del mes que viene.

Una vez finalizada ésta "será el momento de hablar de nuevo", advierte Yamandú Reboiras, cuya intención es "que el pueblo sepa de verdad todo lo que ha pasado, ya que toda esta polémica no se produce por un simple cartel".

Muy molesto, el presidente del motoclub "Sentolos Rasing" confiesa que en su entidad ya están "bastante cansados" de todos los problemas encontrados, pues hay que recordar que desde que se organizan este tipo de concentraciones moteras no es la primera vez que el colectivo tiene problemas con la Administración local, y no siempre se debió a polémicos carteles, como en la actual y la anterior edición.