Seis asturianos que ayer regresaban a Gijón se llevan un ingrato recuerdo de Vilagarcía tras sufrir un grave accidente de motocicleta en la calle Rosalía de Castro, el eje que enlaza Carril con el centro urbano.

María Teresa Regueiro R., de 38 años, viajaba de paquete con su marido en una moto de gran cilindrada, una Honda Pan-Europea, de 1.300 c.c., cuando por motivos no aclarados, ésta le hizo un extraño, pues se le levantó la rueda delantera, y les precipitó sobre el asfalto.

El piloto, de nombre Santiago, salió despedido por los aires y solo sufre algunos golpes y rasguños. Pero la peor parada fue su mujer, pues la motocicleta, de unos 500 kilos de peso, le cayó encima de la pierna, por lo que sufre fractura abierta de tibia y peroné.

La víctima, tras ser estabilizada en la propia calzada por el personal sanitario del 061, fue trasladada al Hospital de O Salnés para decidir sobre la intervención quirúrgica.

El siniestro se produjo cuando los seis amigos iniciaban su viaje de vuelta a Gijón, tras haber pasado el fin de semana con unos amigos suyos en Carril (Vilagarcía).

Circulaban en tres motocicletas de carretera, y el matrimonio accidentado iba en el medio, por lo que fueron los compañeros que le sucedían los primeros en alertar a los servicios de emergencias.

"Acabábamos de despedirnos de unos amigos que tenemos en Carril con los que habíamos comido", explica Mireia, una de las amigas que integra el grupo.

Las tres parejas llevaban un tiempo realizando viajes en sus motocicletas, el anterior "hace unos días a Aranjuez", una afición que comparten desde hace un año.

Pero el piloto accidentado y su mujer tienen una gran experiencia. "Fueron quienes nos contagiaron este placer de viajar en moto, porque ellos llevan 18 años recorriendo toda España cada vez que llega el buen tiempo".

Asegura esta amiga que éste es el primer accidente que sufren en todo este tiempo, "pues Santiago es muy prudente a la hora de conducir".

"No sé que les pudo haber pasado pues lo único que nos han dicho es que se le levantó la rueda delantera y ya no pudo controlarla", explica.

Otros moteros que se encontraban en la zona también destacan la dificultad de esa maniobra. "Hacer un caballito con este tipo de vehículos es casi imposible". De hecho, el conductor fue incapaz de controlar el vehículo que se fue al suelo sin que interviniese nada extraño a primera vista.

El accidente ocurrió ayer sobre las cinco de la tarde, justo frente al Museo del Ferrocarril, en las proximidades de las playas urbanas de A Concha-Compostela.

Los primeros en llegar al lugar fueron los miembros de Protección Civil que prestaron auxilio inmediato la mujer herida. Luego llegó la Policía Local que realizó el atestado y reguló el tráfico y a los pocos minutos una ambulancia medicalizada del 061, que estabilizó a la paciente en el lugar y la trasladó luego al Hospital de O Salnés, sito a escasos diez minutos del lugar del siniestro.

En este tiempo se formó en el lugar del accidente un nutrido grupo de curiosos, alguno de los cuales dificultó las tareas de atención a la mujer herida, al restar espacio a los servicios de emergencias que además tuvieron que tomar precauciones con la motocicleta accidentada, para evitar que se incendiara.

La Honda Pan-Europea, con matrícula 6585-DLS sufre daños importantes en la parte frontal, pues la horquilla giró 90ª sobre el nivel del manillar. Además, los servicios de Protección Civil tuvieron que vaciarle el depósito de carburante y rociar el motor con espuma, con el fin de prevenir que explotase o prendiera fuego.

Los acompañantes de la mujer herida tuvieron que permanecer ayer en Vilagarcía para realizar varias gestiones en relación con el grave accidente de tráfico, aunque afortunado al haber solo un herido.