Todavía el reloj no marcaba las nueve de la mañana cuando más de un centenar de personas se lanzaba a caminar por la ruta espiritual camino de Vilanova. El motivo no era otro que el de conseguir fondos para rehabilitar la emblemática iglesia de A Pastoriza, en pleno casco antiguo vilanovés, que se cae a pedazos por la falta de mantenimiento y su abandono. Todos ellos entregaban a la organización un pequeño díptico en el que figuraban el nombre de sus patrocinadores (empresas o particulares) y la intención de cubrir todo el recorrido, unos 24 kilómetros, para aportar lo máximo posible a la causa.

El grupo comenzó a disgregarse prácticamente desde el inicio debido al ritmo que imprimían unos u otros, aunque siempre se acababan reagrupando en las tres zonas de descanso habilitadas durante el recorrido. Tras varias horas de duro esfuerzo, la práctica totalidad de participantes en el evento llegaba a la meta. Tan solo se registraron dos abandonos, ambos en las inmediaciones de la capilla de Santa Marta, en Ponte Arnelas.

Pablo Ventoso, uno de los integrantes de la comisión, se mostraba ayer satisfecho con la participación alcanzada en esta iniciativa. Ahora, la organización da un mes a todos los asistentes para ingresar el dinero en la cuenta que la comisión de recuperación del templo ha abierto en una entidad bancaria del municipio. La cantidad íntegra que consiga recaudarse se destinará a la rehabilitación primordial en estos momentos, la del tejado. "Es la primera fase de la actuación, ya que se encuentra en pésimas condiciones y amenaza con venirse abajo en su totalidad, por eso es urgente actuar sobre él", reconoce Ventoso. El resto del templo se irá rehabilitando poco a poco.

Además de esta ruta, la comisión tiene previsto comenzar la próxima semana a repartir cartas entre todos los vecinos de la parroquia de San Ciprián de Vilanova, a la que pertenece la iglesia de A Pastoriza, una serie de cartas en las que se pide colaboración económica, dentro de las posibilidades de cada feligrés. La comisión continúa trabajando en otras actividades para conseguir fondos.