La presencia de biotoxinas lipofílicas continúa ampliando su radio de acción en la ría de Arousa. En la jornada de ayer, los análisis realizados por el Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño (Intecmar) de Vilaxoán, determinaron la necesidad de prohibir la extracción de mejillón en cuatro polígonos de la ría de Arousa. Los cuatro polígonos en los que se ha prohibido la extracción son A Pobra B, D y H y el Cambados B.

Con la decisión adoptada ayer, en la ría de Arousa solo quedan siete parques flotantes dedicados al cultivo de mejillón en condiciones aptas para la extracción y comercialización del bivalvo, mientras otros 15 permanecen cerrados.

En la misma ría, la toxina ha dado un respiro a los parques flotantes dedicados al cultivo de ostra, al decidir el Intecmar, tras ver los resultados de los análisis realizados que se podría levantar el cierre de los polígonos Cambados D y O Grove A, cuya prohibición en la extracción se decretó el pasado jueves. La buena noticia para los cultivadores de ostra no se traslada a los del mejillón que poseen bateas en estas zonas, ya que continúan cerrados desde el pasado 24 de abril.

Donde parece haber dado un respiro la toxina lipofílica ha sido en la ría de Vigo. Al decretar el Intecmar la apertura de tres polígonos mejilloneros. Se trata de los Cangas C y D y el Vigo A en los que se había prohibido la extracción el pasado sábado. En esta ría solo permanecen cerrados a la extracción de mejillón desde mediados de abril tres polígonos: Cangas F, G y H.

En el resto de rías gallegas, la presencia de la toxina continúa sin remitir, lo que obliga a mantener prohibida la extracción en todos los polígonos de Pontevedra, Muros Noia, Corme, Baiona y Sada. De todas formas, es probable que en Pontevedra pueda abrir el Cangas A, cerrado desde el sábado, y que en la tarde de ayer dio su primer negativo, paso previo a una posible apertura en las próximas horas.

La presencia de toxinas en las aguas gallegas vuelve a provocar un serio problema económico a un sector que no acaba de levantar la cabeza. Tanto los episodios tóxicos como la presencia de anémonas han provocado que el último año sea uno de los peores para el sector bateeiro en el apartado económico.

El sector espera que la presencia de toxina lipofílica vaya remitiendo en las próximas semanas para poder extraer y comercializar mejillón tras ver como se frustraba la campaña de las últimas navidades.

Donde también se realizan controles es en las especies infaunales (almeja, navaja, ...). En principio, en los bancos marisqueros más importantes de la ría de Arousa no se ha detectado la presencia de toxinas como para obligar a su cierre cautelar, por lo que continúan trabajando con normalidad.