La técnico de la oficina de turismo de la Praza da Peixería (Vilagarcía) atendió sobre las 13,30 horas de ayer dos consultas con diez minutos de diferencia: una de una pareja de Madrid, y otra de un grupo de tres jóvenes procedentes de La Rioja. Ambas tenían algo en común: se dejaron seducir por el mercadillo ambulante de la capital arousana, y que se celebra prácticamente al lado de donde está la oficina.

Así, la madrileña Ángeles Castro confesó que habían acudido a Vilagarcía el sábado por la mañana adrede "para ver el mercadillo", mientras que una cuarta joven riojana se reunía con sus compañeros tras comprar una pieza de ropa en los puestos del mercado.

Con independencia del atractivo que pueda suponer un mercado ambulante como el de Vilagarcía, ambos grupos reflejan como el turista que llega a O Salnés pretende conocer algo más de Galicia.

Ángeles Castro y su compañero Juan Manuel Carro, por ejemplo, se alojan desde el miércoles en un hotel de A Toxa y desde entonces visitaron Sanxenxo, Combarro, Vigo, Santiago de Compostela y Pontevedra, y ayer por la tarde pretendían conocer Cambados. Ángeles Castro afirma que "Combarro me pareció precioso, y Pontevedra me sorprendió muchísimo. Es una ciudad con mucha vida". En el caso de Juan Manuel Carro, destaca Santiago y Combarro.

Es la segunda vez que esta pareja de madrileños visita Galicia. La primera había sido "hace siete u ocho años, y esta vez volvimos porque nos lo recomendó la agencia", afirma Ángeles Castro. Ambos se mostraron asimismo muy contentos con la calidad de los servicios hoteleros y de restauración de la zona, "así como con la amabilidad de la gente".

En cuanto al cuarteto riojano, es la primera vez que visitan Galicia, y se hospedaron el jueves y el viernes en O Grove, desplazándose ya ayer por la tarde a Santiago. Vieron Cambados, Combarro, Sanxenxo y las islas Cíes, y les encantó el paseo de Pedras Negras (en San Vicente do Mar, O Grove) y la gastronomía. En las Cíes hicieron dos rutas de senderismo.