La Cofradía de A Illa va a solicitar en breve un encuentro con los responsables de la Consellería de Medio Rural en Pontevedra para activar el protocolo de protección que cada año, se aplica para evitar la masificación del islote de Areoso. En esta ocasión, entre los puntos que quieren abordar en el encuentro, la Cofradía va a plantear que sea el personal de la propia Xunta de Galicia el que asuma la vigilancia y control de las embarcaciones de recreo durante los fines de semana.

"Nosotros no tenemos los suficientes vigilantes ni capacidad para hacernos cargo de esa tarea, por eso creemos que debería ser la Xunta la que se ocupase de ello, poniendo a su disposición una de nuestras lanchas", explica el patrón mayor de A Illa, Manuel Ángel Iglesias. Tras tres años aplicando una serie de medidas de protección, entre la que destaca la prohibición de acercarse a menos de 100 metros de Areoso con una embarcación a motor, la Cofradía ha constatado que la situación del banco marisquero ha mejorado notablemente, pero entienden que queda mucho todavía por hacer. De hecho, el pósito puso en marcha hace tan solo unos meses un proyecto de regeneración del banco marisquero que, por el momento, ofrece buenas expectativas y teme que se pueda ver dañado por una masificación importante del islote, y sobre todo por las hélices de las embarcaciones. En ese proyecto, además de arar todo el terreno en la zona, se sembraron más de 30.000 euros de almeja que "según los estudios técnicos, ha registrado un porcentaje de fijación muy bueno, cuando lo habitual es que muera entre el 70 y el 80 %", indica Iglesias.

Capa "muy superficial"

Pero el principal problema es que esa almeja se encuentra "en una capa muy superficial, a menos de cuatro centímetros por debajo de la arena, por lo que si se registra demasiada actividad de hélices, puede acabar por morir toda. algo que supondría un duro golpe para la Cofradía".

El pósito esperará a que pasen los días festivos para contactar con Medio Rural a fin de perfilar el plan de protección y como se va a aplicar. Serán los propios trabajadores de la institución los que instalen las 14 boyas que rodearán Areoso y que fijarán el punto más próximo al que puede acercarse una embarcación a motor. Estarán instaladas en el mismo lugar que en 2013.