La Semana Santa de Vilagarcía no está de capa caída. Pese a que en algunos pueblos de España la falta de relevo generacional en las cofradías religiosas ha puesto en peligro la continuidad de centenarias procesiones -en 2012 en Vigo se suspendió El Encuentro por falta de costaleros-, la capital arousana cuenta este año con más personas dispuestas a portar imágenes durante la Semana Santa. Prueba de ello es que mientras que el año pasado había doce mujeres voluntarias para portar la Virgen -las justas para que pueda salir en procesión-, actualmente hay 19. "Pero serán 16 las que la lleven", precisa el secretario de la Cofradía Segunda Estación, José Manuel Mariño.

El cofrade se muestra consciente de que la Semana Santa de Vilagarcía no puede presumir de una arraigada tradición como sí existe en otras ciudades, por lo que su objetivo es "mantenerla lo mejor posible".

La inmensa mayoría de las mujeres que participarán activamente en los desfiles religiosos de Vilagarcía durante los próximos días tienen edades comprendidas entre los 20 y los 40 años.

Además de ellas, la Cofradía Segunda Estación cuenta con 24 porteadores para llevar a hombros los pasos. Además, una decena de niños se encargan de portar los motivos de la Pasión, como por ejemplo la corona de espinas, los clavos, unas tenazas... "Hay más gente colaborando en la Semana Santa: personas que llevan los estandartes, que van con la cara cubierta con el capuchón, ...", recalca José Manuel Mariño.

Más cruces

Otra prueba del incremento de participación en las procesiones de Semana Santa -fundamentalmente las del Jueves y Viernes Santo, que son las principales- es que los desfiles contarán con cuatro cruces en lugar de las dos del año pasado. "Había otras dos personas que querían llevarlas, pero no tenemos más cruces y tuvimos que dejarlo en cuatro", puntualiza el secretario de la cofradía.

La hermandad cuenta con 200 cofrades, casi todos de edades avanzadas, por lo que no pueden llevar los pasos de la Semana Santa. Mariño admite que no existe relevo generacional en este sentido, pues los jóvenes que están integrados en la agrupación son niños, hijos o nietos de los actuales cofrades.

Para pertenecer como cofrade -todo el año- lo único que se requiere es el pago de una cuota anual de 15 euros. Los voluntarios puntuales no deben abonar cantidad alguna.