M.C., la madre de A.V.C., contactó ayer con FARO desde Lanzarote, donde reside, para indicar que está dispuesta a llevarse a su hijo con ella, "si es que él quiere cambiar y venirse conmigo para empezar de nuevo". Explica que "en el pasado tuvo problemas pero ahora está mejor, aunque lógicamente a veces se siente solo".

Esta mujer explica que se fue de O Grove y abandonó a su pareja cuando aún estaba embarazada de A.V.C., de ahí que la relación familiar resultara siempre compleja. El chico volvió a O Grove siendo un niño y se crió con su abuela, "pero yo sabía de su relación con esta chica de Poio y también que ella tenía diferencias y reproches con su familia", esgrime la madre del joven imputado.

Desde Lanzarote apostilla que "la novia de mi hijo estaba distanciada de su madre, y lo que hicieron ahora fue unirse las dos en contra de mi hijo".

Lo que ocurre, continúa, es que "tanto mi hijo como su novia son muy posesivos, por eso tuvieron muchas complicaciones en su relación, aunque esto no quiere decir que la retuviera contra su voluntad; insisto en que mi hijo puede tener un carácter fuerte, pero no es lo mismo que hace unos años, aunque a veces peca de inocente, y por estar tan enamorado cometió el error de contarle su pasado, que es lo que se esgrimen ahora para envolver esta denuncia".