Con la llegada de la primavera y la subida de las temperaturas después de un duro invierno la importante población de ardillas existente en la isla grovense de A Toxa ha salido de su letargo. En los últimos días la actividad de estos animales ha sido frenética, para agrado de cuantos pudieron visitar el territorio insular o cuantos trabajan allí, ya que pudieron detenerse a observar de cerca el constante ir y venir de las ardillas y sus trepidantes escaladas a los árboles. Hay que tener en cuenta que A Toxa dispone de una gran plantación de pinos que ayudan a crear el entorno ideal para la pervivencia de esta especie.