Seis jóvenes intérpretes de un total de 54 presentados -49 el pasado año- han sido seleccionados para la final del "III Concurso para Xóvenes Intérpretres Jorge Domínguez". Esta primera fase se celebraba el pasado fin de semana, sin ser abierta al público por lo que los jóvenes instrumentistas sólo actuaron ante la presencia del jurado.

Los finalistas designados han sido tres en cada una de la dos categorías. En modalidad infantil, el jovencísimo clarinetista de Padrenda, Ero Rodríguez González, con tan sólo ocho años, sorprendió por su aplomo pese a llevar tan sólo tres meses estudiando clarinete, y se adjudicó con sus 289 puntos la máxima puntuación de los 31 concursantes de su categoría.

En la final le acompañarán la también clarinetista Alejandra Tilve Argibay (287 puntos), natural de Dena, y la pianista Aldara Pazos Domínguez (282), también de Dena y quien precisamente venció en la final de la edición de 2013.

En categoría juvenil (nacidos entre 1995 y 2002) concurrieron 23 participantes. La máxima puntuación fue para Andrea Méndez Castro (Dena), con 212 puntos, clarinetista que se adjudicó precisamente el certamen el pasado año.

Segundo clasificó el pianista cambadés Rodrigo García Carro con 206 puntos, y tercero el percusionista de Simes, Agustín Agís Ucha con 194.

El jurado valoró la calidad y el talento en la interpretación, así como la capacidad y madurez musical y escénica del intérprete, más la solvencia técnica de la obra escogida.

En esta primera fase sorprendió al jurado sobre todo la categoría infantil, puesto que, según reconoce el profesor Juan Portela, "son los niños de ocho, nueve y diez años los que ahora están pisando más fuerte y están adquiriendo mucho nivel, mientras que tal vez los jóvenes, a tenor de lo visto en esta primera fase, se están estancando un poco". Buena prueba de ello fue la actuación de Ero Rodríguez que, pese a llevar tan sólo tres meses estudiando clarinete, acudió a concursar interpretando un movimiento de una obra propia de un tercer curso de esta disciplina.

Ahora los tres finalistas de cada categoría están citados para una fase final, ésta de carácter público, que se celebrará el 13 de abril en el Centro Social de Dena a las 18 horas.

En ella cada uno deberá interpretar una obra entera, pudiendo contar para ello si el instrumentista lo requiere, con acompañamiento de piano. Eso sí, la obra a interpretar deberá ser diferente a la que han elegido para concursar en esta primera fase. Por delante tienen pues casi tres meses para ponerse manos a la obra, estudiar y pulir la interpretación de la obra escogida.

Eso sí cada finalista, por el hecho de serlo, tiene asegurado ya un premio: el primero de cada categoría recibirá un lote de material musical, otro de accesorios para su instrumento, una matrícula gratuita para el campamento musical de verano y entradas para un concierto de la Orquesta Sinfónica de Galicia; los segundos, lotes de material musical y de accesorios para instrumento más entradas para el concierto antes citado; y los terceros lotes de material musical y entradas para el concierto.

Entre ambas categorías, por tanto, seis premios cuyo valor total asciende a 1.000 euros.